Dos plantillas. Dos onces que se conocen de memoria. Barça y Sevilla se han aburrido las caras en las últimas temporadas y el partido de este sábado en el Wanda Metropolitano guardará muy pocos secretos para unos y otros. Las alineaciones de Vincenzo Montella y Ernesto Valverde parecen cantadas a pocas horas para la final. Los dos entrenadores no tienen condicionantes y podrán jugar con sus mejores futbolistas.

 

El resultado es una incógnita, pero el último precedente, en la Liga, sirve para hacerse una idea de por dónde pueden ir los tiros. El Sevilla empequeñeció al Barça en el Ramón Sánchez Pizjuán el pasado 31 de marzo. El 2-0 fue injusto con los andaluces, que vieron cómo Leo Messi, suplente, dinamitaba el partido en los últimos minutos para acabar firmando un empate.

El Barça tiene más recursos, pero ya está avisado. Y más después del desastre de Roma.