Hacía muchos meses que el barcelonismo no se sentía tan orgulloso de su equipo como después del partidazo del Barça de Koeman contra el Sevilla en la vuelta de las semifinales de la Copa del Rey, una remontada que ha valido un billete para la final de la Cartuja, pero también para certificar que hay motivos para la esperanza en un annus horribilis.

"Aunque el Barça no hubiera pasado, hubiera sido un partido para estar orgullosos del equipo", reafirma Dani Senabre, colaborador de ElNacional.cat, en su vídeo de análisis. ¡"Qué noche! ¡Una noche histórica, pero también histérica!".

Senabre alaba el enorme trabajo de Koeman, capaz de volver a superar al Sevilla sin cambiar el sistema y destaca el potencial grupal del Barça, capaz de remontar la eliminatoria con un Messi más terrenal de lo que nos tiene acostumbrados, gracias a las grandes actuaciones de jugadores como Dembélé, Pedri o Ter Stegen.

Y claro está, uno de los grandes nombres de la noche fue el de Piqué. "Me quito el sombrero con Gerard Piqué. En Sevilla ya dijo que había opciones de pasar, se jugó el físico para volver antes y ayer aguantó la prórroga para ayudar al equipo, aparte, claro está, de marcar el gol que lo cambia todo".

El barcelonismo, pues, tiene motivos para ser optimista. Hay brotes verdes, y con una final en el horizonte que puede permitir que el Barça cierre una temporada que parecía para el olvido con un título. Ver para creer.