Este sábado Kevin-Prince Boateng no vivió el mejor día de su historia. Después de firmar una actuación más que discutible al Camp Nou contra Valladolid, el futbolista ghanés se encontró una desagradable sorpresa cuando llegó a su domicilio.

Según ha adelantado Mundo Deportivo, unos ladrones aprovecharon que el Boateng estaba jugando contra el conjunto castellano para entrar a robar en su casa, situada en la parte alta de Sarrià.

La misma información asegura que los delincuentes se llevaron joyas valoradas en unos 300.000 euros además de dinero en efectivo.