El Barça y el Atlético de Madrid firman momentáneamente la paz en el caso Griezmann. Después de que el club blaugrana pagara los 120 millones de euros de la cláusula de rescisión del delantero francés, el club colchonero presionó al Barça por|para una negociación antes de la rebaja de la cláusula, que reclamaba 80 millones más. Una negociación ilegal que acabó con correos que salieron a la luz y demostraban las irregularidades del club blaugrana.

Por miedo a nuevas represalias, el Barça ha comprado el silencio del Atlético a cambio de pagarle 15 millones, según adelanta El Mundo, además de un derecho a tanteo sobre algunos futbolistas colchoneros. Entre ellos, el Barça tendrá un derecho futuro de compra en Saúl y Giménez, futbolistas del primer equipo, y algunos jugadores de equipos de categorías inferiores.

Este derecho a tanteo quiere decir que si el Atlético tiene una oferta sobre la mesa para vender a los futbolistas en cuestión, antes de efectuar la venta tendrá que informar al Barça la posibilidad de igualar la oferta para entrar en la negociación. El Barça en este caso podría igualar o mejorar la oferta existente, pero la decisión final sería del Atlético y el mismo jugador, como en cualquier negociación de venta de jugadores.