La pifia del año ha llegado tarde pero ya está aquí. El protagonista es Filippo Perucchini, portero del Ascoli, de la Serie B italiana, que en un partido contra el Palermo ha demostrado una falta de coordinación alarmante.

El error fatídico tuvo lugar en el minuto 26, momento en que el portero recibió un pase de su compañero. En el mundo del fútbol hay muy pocos porteros que se puedan permitir el lujo de hacer filigranas y sin duda Perucchini no es uno de ellos. El italiano, delante de la presión del delantero del Palermo, intentó hacer una finta, pero la jugada le salió tan mal que se acabó introduciendo la pelota en su propia portería.

Por si fuera poco, el gol supuso el 1-0, de manera que la pifia fue todavía más dolorosa. Posteriormente el equipo siciliano acabaría marcando dos dianas más, derrotando el Ascoli por 3-0.