Los árbitros de la final de la Copa del Rey jugada entre el Barça Lassa y el Real Madrid han reflejado en el acta los insultos de los jugadores madridistas Felipe Reyes y Facundo Campazzo y, como es preceptivo en estos casos, han decidido retirar sus licencias federativas hasta que se resuelvan los respectivos expedientes disciplinarios.

Fuentes de la ACB han explicado a Efe que se trata de un procedimiento habitual en los partidos en que se producen peleas, faltas de respeto o insultos, y tendrá que ser ahora el juez disciplinario de la Federación quien decida si se toma alguna medida contra ellos.

Según reflejaron los árbitros en el acta, el base argentino del Madrid Facundo Campazzo se dirigió a ellos diciendo "ladrón" en tres ocasiones, mientras que Felipe Reyes, capitán del equipo, les dijo textualmente "eso es una puta vergüenza, un puto robo". En estas situaciones, los árbitros toman la decisión de retirar las licencias federativas de los jugadores a la espera que se decida si se los sanciona con alguna multa económica o con uno o varios partidos de suspensión.

Respuesta del Madrid

El conjunto blanco no ha tardado mucho en salir al paso de la decisión tomada. El Madrid califica de "lamentables" las explicaciones y aseguran que "seguirá estudiando las medidas y actuaciones a adoptar ante la enorme gravedad de los hechos".

Comunicado del Real Madrid

Ante los comunicados de la ACB y de la AEBA, con respecto a lo ocurrido ayer en la final de la Copa del Rey, el Real Madrid quiere manifestar que las explicaciones y valoraciones emitidas en ambos comunicados son lamentables, teniendo en cuenta la gravedad de lo sucedido.

El Real Madrid por supuesto que comprende los errores humanos que se pueden producir en cualquier deporte, pero exige una respuesta clara a lo ocurrido con una jugada que es revisada por el trío arbitral en el instant-replay, y cuya decisión sorprendentemente es contraria a lo que establece el reglamento, a pesar de la rotundidad de las imágenes televisivas a disposición de los árbitros y que todo el mundo ha podido ver.

El Real Madrid defiende de manera rotunda la existencia de la tecnología para mejorar el arbitraje, la justicia y la limpieza en el deporte y por eso no puede entender la aplicación del reglamento que en este caso han llevado a cabo los tres profesionales del arbitraje en el momento decisivo de la final, al no querer contemplar todas las imágenes que estaban a su disposición.

A la vista de ambos comunicados y ante la falta de respuestas concretas a esta incomprensible decisión de los árbitros, el Real Madrid seguirá estudiando las medidas y actuaciones a adoptar ante la enorme gravedad de los hechos acontecidos.