El Govern de la Generalitat ha interpuesto un recurso de reposición ante el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Huesca contra la resolución que requiere la Generalitat de Catalunya que comunique al Gobierno de Aragón, como muy tarde el próximo 25 de julio, la manera en que piensa proceder al traslado de los bienes del Museu de Lleida al monasterio de Sijena. En su recurso, el Govern alega que los bienes del Museu de Lleida no pueden salir sin que antes el Consorcio del Museo ejerza su derecho de defensa. También aduce la imposibilidad del retorno dado que los bienes afectados se encuentran en manos de terceras personas ajenas al pleito (el Consorcio del Museu de Lleida) o la falta de condiciones físicas de las instalaciones de Sijena para recibir los bienes.

Petición de suspensión

En este sentido, el Govern insiste en pedir la suspensión de la ejecución provisional y que se permita a dos técnicos designados por el Departament de Cultura que puedan comprobar in situ e informar sobre las condiciones en que se encuentran los bienes expuestos al público en el Real Monasterio de Santa María de Sijena (el recurso informa de múltiples deficiencias en la sala y en las vitrinas donde se tienen que depositar las piezas). Además, la Generalitat alega la posesión del monasterio de Sijena por terceras personas ajenas al proceso (la Comunidad de Belén), y que los bienes objeto de esta ejecución profesional conforman una colección que no puede ser disgregada, de acuerdo con la Ley Catalana de Patrimonio Cultural. Por otra parte, la Generalitat esgrime que, de acuerdo con la función social del Derecho de Propiedad, le corresponde el ejercicio de las competencias jurídico-públicas sobre los bienes procedentes de Sijena, dado que son unos bienes sometidos a la Administración catalana.

Las pinturas del MNAC

Este recurso hace referencia a las piezas de Sijena depositadas en el Museu de Lleida, pero no afectan directamente a las pinturas de Sijena depositadas en el Museu Nacional d'Art de Catalunya (MNAC), que están inmersas en un juicio muy similar, pero pendientes de otra resolución judicial, con el agravante de que su traslado todavía es técnicamente más inseguro, más perjudicial y más complejo.