La misma semana que Chelsea Manning, la principal condenada por el caso Wikileaks, sale de la prisión, se presenta ante la prensa Garzón / Assange, el juez y el rebelde, unos coproducción hispanoalemana dirigida por Clara López Rubio y Juan Pancorbo. Un documental grabado en Ecuador, en Londres, en España y en Suecia, que muestra la tarea de Baltasar Garzón como jefe de la defensa del líder de Wikileaks, Julian Assange, refugiado en la embajada de Ecuador en Londres desde hace casi 5 años. Esta película está programada al Festival DOCS Barcelona, y el día 29 se estrenará en Canal Historia...

La complicada historia de Assange

Assange está reclamado por la justicia sueca por un delito sexual. Él asegura que eso es un montaje. El gobierno de Ecuador le dio asilo político, no por el caso sueco, sino porque considera que si es enviado a Suecia, de allí se lo podría enviar a los Estados Unidos, donde correría el riesgo de ser sometido a un juicio injusto (podría ser juzgado por espionaje por un tribunal militar que podría llegar a pedir 35 años de prisión). El gobierno británico se niega a dejar salir a Assange de la embajada para ir al Ecuador, y por eso este está bloqueado en la sede diplomática. En realidad, el comité contra las detenciones arbitrarias de la ONU dictaminó en 2015 que la situación de Assange era ilegal y dictaminó que Suecia y Gran Bretaña le tenían que facilitar libertad de movimientos, pero no ha habido ninguna reacción ni británica, ni sueca. El último caso judicial pendiente de Assange prescribiría en 2020 (tres acusaciones ya han prescrito), y se teme que la justicia sueca e inglesa se mantengan inactivas hasta esta fecha con el fin de desgastar al activista y evitar un proceso legal.

La implicación de Garzón

Desde el momento en que Assange se encerró en la embajada de Ecuador, incluso antes de tener reconocido el asilo político, Wikileaks pidió a Baltasar Garzón que dirigiera el equipo de defensa del hacker, por su prestigio internacional. Él aceptó trabajar de forma altruista. Desde entonces dirige el equipo de defensa de Assange. Garzón asegura que Assange es un "chivo expiatorio" para esconder los comportamientos turbios del gobierno y el ejército de Estados Unidos que destapó Wikileaks. En el documental se deja claro que el gobierno de Estados Unidos ha investigado a Assange, pero que no ha cursado ningún orden de detención contra él, porque espera espera hacerlo en el momento más inesperado. En Estados Unidos no son excepcionales las amenazas más contundentes contra Assange, como se muestra en el filme.

Garzon Assange 2

Un juez no tan ejemplar

Baltasar Garzón se hizo famoso por sus actuaciones en  la Audiencia Nacional, un tribunal especial, heredero del Tribunal de Orden Público franquista. Allí Garzón acumuló muchos casos con una fuerte resonancia mediática, sobre todo relativos al terrorismo, aunque se critica que en algunos casos no efectuó las diligencias debidamente y que muchos de los arrestados con gran despliegue mediático finalmente fueron liberados sin cargos. Pero la principal acusación contra Garzón es que en la lucha contra el terrorismo, en el País Vasco, y también en Catalunya, permitió que en los casos que instruía se produjeran torturas y vulneraciones de los derechos humanos, como pasó en la célebre redada antiindependentista que tuvo lugar antes de los Juegos Olímpicos de 1992. Miguel Castells, abogado de numerosos etarras que había actuado en muchos casos juzgados por Garzón, argumenta que este juez fue considerado un juez ejemplar por los medios de comunicación, a pesar de su expediente, cuando sólo actuaba contra ETA y contra el independentismo, pero que cuando trató de aplicar las mismas técnicas a la lucha contra la corrupción o a los herederos del franquismo empezó a ser perseguido. Garzón ya recibió muchas críticas cuando intentó procesar al dictador chileno Augusto Pinochet mientras este estaba en Londres, en tratamiento médico. Al fin, cuando intentó investigar la trama Gürtel del PP cómo lo había hecho con los etarras, con escuchas a los abogados, fue juzgado. En 2012 sería condenado a 12 años de inhabilitación. Garzón, cuando explica su caso al documental se muestra indignado: "Me tiraron en la lona", me patearon", "me pisaron como a un pollo"... Las patadas a Garzón fueron metafóricas. Las que sufrieron algunos de los acusados en sus juicios, mucho más reales. En el documental las vulneraciones de Garzón a los derechos humanos ni aparecen; el director asegura que "está convencido del compromiso de Garzón con los derechos humanos".

garzon asange 1

Julien Assange, controvertido

El australiano Julien Assange es un personaje controvertido. Estudió periodismo y es muy aficionado a la informática. Cuando era joven actuó como hacker, pero no se vio involucrado en delitos graves. A partir de 2006 se implicó muy profundamente en Wikileaks. Desde allí denunció la inoperancia de los medios de comunicación tradicionales, que eran incapaces de destapar muchos escándalos y defendió que la clave de la transparencia era crear una nube donde se pudieran volcar informaciones confidenciales en la red, para que todo el mundo las pudiera usar. En 2010, mientras estaba de vacaciones en Suecia, Julian Assange fue acusado por dos mujeres, una por acoso y la otra por violación. En un primer momento la justicia desestimó los casos, pero más tarde los reabrió y dictó una orden de detención internacional a Interpol. Esta reapertura del caso coincidió, quizá no por casualidad, con la filtración por parte de Wikileaks de decenas de miles de documentos que implicaban al ejército de Estados Unidos con abusos a los derechos humanos, especialmente en Oriente Medio. Assange fue detenido por la policía británica que lo dejó en libertad condicional. El fundador de Wikileaks rompió la libertad condicional y se refugió en la embajada del Ecuador, donde pidió asilo político. Pero las autoridades británicas no le permiten salir de la legación diplomática y su situación está bloqueada... Assange siempre ha afirmado que el caso sueco es un montaje e insiste en qué, de hecho, no ha sido imputado, y que sólo se lo cita a declarar, pero que a partir de esta cita podría ser extraditado de Suecia a Estados Unidos.

La vanidad

Daniel Domscheit-Berg, cofundador de Wikileaks y brazo derecho de Assange, publicó un libro, Dentro de Wikileaks, en el que acusaba al refugiado en la embajada ecuatoriana de haber pervertido los objetivos de Wikileaks al haber asumido demasiado protagonismo. Domscheit-Berg es claro y condena absolutamente la persecución de Assange, pero no ahorra unas críticas a su vanidad. La vanidad también es una de las características del juez español, muy aficionado a aparecer a los telediarios y a presentarse como el salvador de España, incluso con flirteos con la política. Wikileaks en las últimas elecciones norteamericanas colaboró con la campaña de Donald Trump filtrando informaciones incómodas sobre el Partido Demócrata e Hillary Clinton, y eso hizo que Assange perdiera mucho apoyo entre los sectores progresistas norteamericanos. Hay quien cree que el encierro en la embajada ha desequilibrado a Assange.

¿Por qué Garzón?

Juan Pancorbo confiesa que es un documental que quiere estar "muy cerca de los personajes" (incluso reconoce que los abogados del caso revisaron la película para que no pudiera salir nada que pudiera ser usado en contra de Assange). Y, evidentemente, el resultado es un filme impregnado de admiración por Assange y por Garzón. En realidad, los directores reconocen que querían hacer una película sobre Garzón y finalmente decidieron hacerla sobre el vínculo del juez con Assange. A pesar de todo, a lo largo del documental, el papel del juez va quedando desplazado anteel protagonista real de la historia, que no es otro que el rebelde, Assange. Un Assange que no hace sino ir deteriorándose, psíquicamente y físicamente, a lo largo del tiempo. En el documental es palpable el efecto que tiene sobre él el asedio legal y físico. A pesar de todo, Assange, en el documental, se mantiene muy reservado, frío, distante, centrado en los aspectos legales de su defensa y no expone mucho su personalidad. En realidad, el caso Wikileaks fue lo bastante importante como para dedicarle no uno, sino muchos documentales. Y la situación de Assange, un hombre cerrado cinco años en una habitación, sin estar encarcelado y sin ser libre, es absolutamente cinematográfica. Quizás un juez / abogado estrella no era la mejor vía para presentar el caso. Y, a pesar de todo, era necesario un documental que volviera a poner sobre la mesa un caso que no está cerrado, pero que parece que ha quedado oculto en los últimos tiempos. 'Garzón / Assange, el juez y el rebelde,' afortunadamente, vuelve a poner de actualidad un caso que no está cerrado y que pone de manifiesto el grave problema de la información en el mundo actual.