Hoy se ha presentado en la Setmana del Llibre en Català la Associació Professional de Escriptores i Escriptors de Literatura ESCRIVIM. Esta asociación ha sido fundada por treinta y seis reconocidos autores, que se consideran profesionales de la escritura, como Jordi Sierra i Fabra, Care Santos, Meritxell Martí, Jaume Cela, Jaume Copons, Maite Carranza y Gemma Lienas. Maite Carranza, presidenta de la Junta de ESCRIVIM, ha protestado porque no se considera a los escritores como profesionales de la cultura. Por su parte, Pere Martí, Anna Manso y Àngel Burgas han incidido en la falta de un debate serio sobre las múltiples causas de esta precarización: la crisis económica, la ultraliberalización, la socialización malentendida del libro literario en las aulas, la falta de políticas que protejan a la creación, la coexistencia con las nuevas tecnologías, la falta de interés por la lectura, la desvalorización del libro, las plataformas de venta digitales...

presentacio

Martí Piñol en la presentación de ESCRIVIM.

Un manifiesto contundente

Elisenda Roca ha leído un manifiesto en que se denuncia que está perviviendo el sistema franquista en que los escritores escribían en defensa de la lengua y la democracia. Y que eso se produce al mismo tiempo que el mercado del libro se profesionaliza sin que se profesionalicen los escritores más que de forma excepcional. Los autores denuncian que no se les considera trabajadores de la cultura, a diferencia de los editores, los libreros, los asesores..., y que justamente por eso viven en una situación extremadamente precaria, que se ha visto agravada por la crisis. Los escritores cargan contra la liberalización del sector, contra la desvalorización del libro... Pero también hacen un ataque directo al concepto de acceso gratuito a la cultura: "Según este discurso la CULTURA (cine, música y libros) únicamente son contenidos – sin valor económico- de los nuevos contenedores -los medios tecnológicos- que sí que tienen una traducción en valor económico: conexión a Internet, ordenadores, móviles, tablets, televisores...".

Llamamiento a los creadores

ESCRIVIM representa a los escritores, pero pide a todos los profesionales de la cultura que se organicen y que defiendan los derechos de los creadores "que malviven al margen el sistema". Por eso han hecho una firme defensa de la intervención legal de las instituciones en defensa de sus derechos, frente a la piratería y frente al mercado. Los creadores de la asociación saben que su tarea no será sencilla. De hecho, apuestan por un cambio global de la relación de la sociedad con la cultura. Uno de los últimos puntos de su manifiesto pretende: "Encarar con voluntad de cambio el nuevo paradigma del siglo XXI, donde hace falta redefinir el valor público y privado del libro, de los creadores y de la literatura, y encajarlo con las nuevas tecnologías, el mercado, el Estado y los cambios de valores de la sociedad".