La unión de los tranvías por la Diagonal, uno de los proyectos estrella de la alcaldesa Ada Colau, tendrá que esperar. La teniente de alcalde de Urbanismo, Janet Sanz, anunció ayer que el proyecto ejecutivo no verá la luz hasta este otoño, con lo que las obras no comenzarían hasta 2018, un año después de lo anunciado por el gobierno municipal. El principal problema que debe afrontar el ejecutivo de Colau es conseguir los apoyos políticos necesarios, un consenso que por el momento no ha llegado.

El anuncio de Sanz se produjo en el marco de la conferencia Tramvia-Ciutat que se está celebrando en la Universitat Politècnica de Barcelona. Pese al convencimiento expresado por la responsable de Urbanismo, hubo algunas palabras que denotaron la ambigüedad de las fechas. "Tarde o temprano se hará", sostuvo.

¿Por la Diagonal? ¿Un tranvía enterrado?

El acuerdo político para este proyecto, que se prevé difícil, dependerá en gran medida de los estudios informativos sobre las alternativas planteadas al tranvía por la Diagonal. Algunas de ellas son el tranvía soterrado, opción inédita en la capital catalana y que encarecería la construcción, la alternativa del autobús D20 o, inclusive, optar por algunos de los trazados de tranvía alternativos, como eran los recorridos por Urgell y Gran Via, Provença, Passeig de Sant Joan y Gran Via, entre otras opciones a barajar. 

El grupo demócrata (PDeCat-Unió-Demòcrates), el más importante tras BComú, es el más beligerante con el tranvía, lo que podría complicar los avances del ejecutivo de Colau. La alcaldesa cuenta actualmente con 15 votos, muy lejos de la mayoría del consistorio, situada en 21 ediles. La oposición llegó a ponerse de acuerdo en el desacuerdo hace un año: todos los grupos de la oposición, incluso el PSC -ahora en el gobierno- mostraron su disconformidad por la actitud del gobierno municipal que, según ellos, no propiciaba un acuerdo.

El tranvía que coserá Barcelona

El nuevo servicio, que conectará los dos servicios actuales de tranvía, pretende potenciar este modo de transporte y, además, generar una mayor conectividad en la movilidad a través de la Diagonal. La futura red conjunta de tranvía, con sólo 3,9 kilómetros, permitirá conexiones estratégicas con el metro: Diagonal con la L3 y la L5, Verdaguer con la L4 y la L5, Monumental con la L2, Glòries con la L1 y, en un futuro, Francesc Macià con la nueva estación de FGC -línea Llobregat y Anoia-.