Le Monde informa que Manuel Valls quiere ser alcalde de Barcelona, pero también que ha esquivado a Ciudadanos al presentarse en una plataforma donde Cs será un socio más y no el protagonista único o principal.

El diario de centroizquierda francés explica que "la idea la encendieron en la plataforma unionista Sociedad Civil Catalana en diciembre de 2017". La propuesta "parecía entonces excéntrica, incluso surrealista. [...] Ciudadanos no dejó de festejar [a Valls] y, cuando logró su presencia en mítines y manifestaciones anti-independencia, en Cs se convencieron de que se presentaría por sus colores [a la alcaldía de Barcelona]".

"Pero Manuel Valls les ha agarrado a contrapié, anunciando su intención de encabezar un gran movimiento a su medida, libre del control de Cs pero sin perder su apoyoy su red, para acercarse al electorado socialista y catalanista, y sumar representantes de la sociedad civil".

Cs como freno

La corresponsal del diario, desde Madrid, explica que "concurrir bajo la bandera de Ciudadanos habría frenado las perspectivas electorales [de Valls]". Destaca que "ninguno de los máximos líderes de Cs ha asistido este martes a la presentación de su candidatura" y añade que el partido unionista "se ha comprometido a dar plena autonomía política" al candidato francés.

"La situación que vivimos en Catalunya y Barcelona es extraordinaria y merece que todos hagamos un ejercicio de generosidad para ganar Barcelona", concluye citando a Inés Arrimadas.

El diario explica que a Valls le espera un camino muy empinado y que no le será nada fácil llegar a la alcaldía, tanto por la fragmentación del voto en la ciudad, porque "el plan de Valls todavía no es ni un borrador", como por su no muy lograda historia política en Francia.

"Tendrá que superar también los ataques virulentos de los medios soberanistas [y] las críticas de la izquierda alternativa, que recuerda la controversia en torno a la expulsión de la joven gitana kosovar Leonarda Dibrani en 2013 [la chica tenía 13 años y la separó de sus padres], que insistirá en su perfil 'autoritario' y sus duras palabras sobre el Islam," añade.