Los acampados en la plaza de Catalunya ya no pasarán la noche en este punto de la ciudad. Hacia las siete y media de la mañana, un grupo de agentes de la Guardia Urbana acompañados de la brigada de limpieza han hecho efectiva la amenza del Ayuntamiento de Barcelona que hace días que los alerta de un posible desalojo.
En la Plaza Cataluña hay dos colectivos acampados, Acampada por la República, que defiende la independencia y la libertad de los presos políticos y Acampada x derechos, un grupo de sin techo de pide un lugar donde vivir. Dos realidades diferentes, que se han tomado el desalojo de dos maneras también, muy diferentes. Mientras los independentistas han aceptado de buen grado la retirada de las tiendas de campaña, los sin techo han mostrado su rechazo a una decisión que consideran ilegal. Una de las portavoz de este grupo ha criticado que el Ayuntamiento los echa porque "dan mala imagen al turismo" y ha denunciado que no se les está ofreciendo una alternativa. Se pregunta "¿dónde vamos ahora?" y no descarta montar un nuevo punto de acampada en otro lugar de la ciudad.
El Ayuntamiento por su parte, aseguró que se les ha ofrecido "una primera acogida, en un albergue o plazas residenciales" y que una decena de ellos las han aceptado. "Cada día, los servicios sociales visitan este grupo de sin techo y les preguntan qué necesitan, si quieren ser acogidos", afirman fuentes municipales.
Según el consistorio, los acampados saben, desde hace dos semanas que se les acabará desalojando y que la proximidad a la Diada de Sant Jordi lo ha acelerado. "No es que sea San Jordi, es por qué las acampadas en este punto no son un compatibles con la gran concentración de gente que habrá", aseguran.
El Ayuntamiento les obliga a marcharse pero les permite mantener un punto de información para seguir dando voz a sus reivindicaciones. Desde la Acampada por la República, una de sus miembros Mar Claver, ha confirmado que mantendrán "una parada" para hacerse visibles.
Personas vulnerables y turismo de mochila
Entre los acampados en la Plaza Cataluña hay todo tipo de perfiles, "personas vulnerables, otros en riesgo de exclusión y turistas de mochila", según explicó el gerente del Instituto Municipal de Servicios Sociales Jordi Sánchez. El Ayuntamiento ha ofrecido ayuda a todos ellos, 10 ya están en centros de acogida, dos en pensiones, cuatro han rechazado la atención y el resto están siendo valorados.
Por su parte, el primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona Gerardo Pisarello ha pedido la colaboración de todas las administraciones para hacer frente al aumento del número de sin hogar que, como ya explicó El Nacional, se ha duplicado desde que Ada Colau es alcaldesa de la ciudad. Pisarello ha denunciado que la mitad de los que pidieron ayuda municipal en el último medio año provienen de fuera de Barcelona.
Una situación insostenible
Hasta la Plaza de Cataluña se ha desplazado la Síndica de Barcelona, Maria Assumpció Vilà, que ha apoyado el desalojo siempre y cuando se ofrece una alternativa. Según dijo la situación se había vuelto "insostenible" y había problemas de "salubridad" y de convivencia ". Ha pedido al Ayuntamiento que los reallotgi pero ha puesto en duda que haya espacio para todos:" quizá por estos sí, pero para todos los que hay en Barcelona, no sé si hay espacio suficiente. Vilà ha hecho un llamamiento al resto de administraciones para involucrarse en la cuestión.