La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha tildado este jueves de "acto cobarde" los atentados del 17-A en una declaración institucional con motivo del primer aniversario de los ataques en la capital y en Cambrils. "Querían hacernos daño pero no nos contagiaron su odio", ha sentenciado Colau. La alcaldesa ha reivindicado Barcelona como "ciudad de paz" y ha apuntado que la ciudad no ha renunciado a sus "valores" y convicciones.

Con respecto al homenaje de este viernes, Colau ha pedido que los actos conmemorativos tengan a las víctimas como "únicas protagonistas". La alcaldesa ha reiterado el pésame a los familiares y amigos de las dieciséis víctimas mortales y las ha enumerado una por una, emocionándose especialmente al referirse a los dos menores que perdieron la vida y antes de afirmar que la ciudad "no olvidará nunca sus nombres".

"Aquel fue un acto cobarde, que pretendía sembrar el terror en uno de los paseos más amados y más visitados de nuestra ciudad: la Rambla. Querían hacernos daño, y lo consiguieron", ha reconocido Colau. La alcaldesa ha afirmado que los valores y convicciones a favor de la paz de los barceloneses "un año después son más fuertes que nunca". "Somos y seremos una ciudad de paz", ha remachado.

Barcelona, según Colau, seguirá siendo una "ciudad abierta a todas las personas que huyen de la guerra, el hambre y la violencia". Y es que el terror que causó dieciséis víctimas en Barcelona es el mismo al cual se enfrentan "cotidianamente los ciudadanos de Siria, de Iraq, de Afganistán o del Yemen", a opinión de la alcaldesa.

En su discurso, la alcaldesa ha agradecido la "profesionalidad" de los cuerpos de seguridad y de los servicios públicos y la solidaridad con las víctimas "que llegó de todo el mundo". "Entidades y ciudadanos de todas partes que el 17 de agosto y los días posteriores dieron el mejor de sí mismos en el peor momento para todos nosotros", ha dicho Colau, que ha considerado que aunque aquellos fueron "días tristes" la ciudad sacó "lo mejor de sí misma".

En referencia al acto de recuerdo y solidaridad con las víctimas y sus familiares que tendrá lugar este viernes en plaça Catalunya, ha recordado que "todo el mundo está invitado a participar" y ha remarcado que el homenaje tendrá a las víctimas como "únicas protagonistas".

Las afirmaciones de la alcaldesa llegan semanas después de que la presencia del rey español Felipe VI a la conmemoración organizada por el Ajuntament ha generado polémica a las entidades independentistas como el Assemblea Nacional Catalana (ANC), que ha rechazado la invitación de Colau, con el fin de no coincidir con el monarca.

Pero más allá de este acto, Colau ha opinado que el 17 de agosto tiene que ser un día pora que todas aquellas personas que aman la ciudad, que nos sentimos golpeadas de una forma u otra por este ataque, encontramos la mejor manera de expresar nuestros sentimientos. "Algunas lo harán volviendo a pasear en la Rambla, otros dejarán una flor o encenderán una vela, o sencillamente buscarán un momento de recuerdo y recogimiento", ha afirmado.

En este sentido, la alcaldesa ha dicho sentir "orgullo" por una ciudadanía que llenó espontáneamente la Rambla de muestras de pésame y llenó plazas y calles al grito de "no tenemos miedo". Por este motivo, ha dicho, desde el Ajuntament de Barcelona han trabajado para catalogar y digitalizar los más de doce mil objetos, documentos y expresiones de pésame que se recogieron durante aquellos días y abiertas a la ciudadanía a través de la web 'Memorial la Rambla 17A'.