Virginia Maestro fue una de esas sorpresas que dejó Operación Triunfo en su etapa más televisiva y polémica. Ganadora de la edición de 2008, su paso por el programa no solo la convirtió en una figura icónica del talent, sino que también la marcó como una de las concursantes más atípicas de su generación. Hoy, a sus 42 años, su transformación ha sorprendido a quienes la recuerdan como aquella joven de voz suave y presencia tímida.

En un universo de ganadores muchas veces olvidados, Virginia permanece en la memoria colectiva no tanto por su éxito comercial, sino por lo que simbolizó: una ruptura con el molde típico del concurso. Su estilo indie, íntimo y algo retro no encajaba con la maquinaria pop que dominaba el formato. Pero Risto Mejide, jurado por entonces temido y respetado, vio en ella algo más.

VIRGINIA MAESTRO TELECINCO
Virginia Maestro / Telecinco

Virginia ganó Operación Triunfo, pero prefirió mantener un perfil bajo

Risto, conocido por sus críticas feroces, encontró en Virginia una excepción. La protegió, elogió y defendió frente a la presión mediática y del propio jurado. Su favoritismo generó polémica, pero también fue clave en su victoria. Aquella edición fue, probablemente, una de las más comentadas de la historia del programa.

Desde entonces, Virginia ha seguido ligada a la música, aunque fuera del radar comercial. Ha publicado discos, ofrecido conciertos y construido una carrera más personal que mediática. Su nombre no ha estado en realities, ni ha sido carne de titulares sensacionalistas. Ha elegido un camino más discreto pero coherente con su esencia.

Virginia Maestro REDES
Virginia Maestro / REDES

Así es ahora Virginia

Hoy en día ya no está con Risto. Se separaron profesionalmente tras la publicación de su primer disco. Mientras tanto, muestra un cambio físico evidente. Virginia es ahora rubia y luce un rostro más maduro, lejos del aspecto inocente y angelical que mostró en OT. Su transformación es total, pero su estilo sigue intacto: elegante, delicado, con ese sello que la hizo única en OT. Mientras muchos ganadores del concurso han desaparecido del mapa, Virginia sigue cantando. Y, lo que es más importante, sigue siendo ella misma.