Desde En Blau hemos pregonado, por activa y por pasiva, nuestra devoción (compartida por miles de espectadores de TV3) por Maria Fernández Vidal, presentadora de los deportes en el TN Vespre. La periodista catalana hace un trabajo excelente cada día, y en boca suya, las malas noticias que nos regala el Barça esta temporada quedan apaciguadas cuando nos las explica ella. Igual que al revés: los éxitos deportivos de los equipos catalanes toman todavía más vuelo cuando quien nos los explica es ella. Aparte de su trabajo, Maria tiene una sana costumbre: publicar de vez en cuando imágenes sensacionales en su cuenta de Instagram, la gran mayoría, disfrutando de su naturaleza querida. En otras ocasiones, ha publicado imágenes que le han hecho in fraganti, o "pillada", como ella reconoció mientras se desmaquillaba.
"De cuándo todavía podíamos llevar los tobillos al aire. Y no hace tanto", escribía en esta simpática foto que se hizo en octubre de hace cuatro años, una vez habíamos dejado atrás ya el verano y las altas temperaturas. Casi estamos en el mismo día que entonces, cuatro años después. Ahora, sin embargo, ha cambiado la cosa, porque el calor que pega todavía ahora no se aguanta, y menos, en esta época del año. Este año, parece que nos comeremos los panellets en bermudas. Cuando menos, el buen tiempo y las elevadas temperaturas han hecho que este octubre del 2022 Maria, y muchos otros, todavía podamos llevar prendas de ropa que permiten llevar los tobillos al aire. Como acaba de hacer, en una foto deliciosa que le han hecho de estrangis mientras se preparaba para entrar en directo.

Una de las grandes pasiones de Maria, hemos informado en este medio, es la música. Concretamente, tocar la batería, cosa que hace habitualmente, dando clases y dándolo todo con las baquetas. Desde aquí pedimos algún día alguna demostración en el TN, dando un redoble cada vez que diga alguna información especialmente relevante. Hace tiempo que se puso a ello y es una crack en la materia, gracias a las clases que no se pierde por nada del mundo. Sólo hay que ver la emoción que tiene cuándo se sienta delante de la batería o delante de una partitura:



Maria lleva su pasión muy adentro... y muy afuera. Porque en una fotografía de aquellas de pillada que tanto nos gustan, de un compañero, la vemos con un look sencillamente espectacular, camisa blanca y falda negra, pelo recogido en una cola y zapatos maravillosos... Y justo encima del de la izquierda, una pizca por encima del tobillo, le hemos visto un tatuaje por primera vez que no nos habíamos dado cuenta que tenía. Un dibujo que, a primera vista, parece el de la nota musical de un pentagrama. Cuando menos, eso es lo que se observa de lejos.

Maravillosa. Y nosotros, al ritmo de la música que marque ella.