Nadie lo vio venir, pero la viuda del marqués de Griñón, Esther Doña, ha dado un golpe maestro digno de las mejores maniobras de los expertos en bienes raíces. Mientras la atención mediática se volcaba en Tamara Falcó, convertida en influencer de élite y heredera mediática por excelencia, la gran beneficiada en la distribución de la herencia del palacio El Rincón fue, en realidad, la persona que más tensiones había generado dentro de la familia Falcó.
Y es que tras la muerte de Carlos Falcó en 2020, víctima de la COVID-19, todo apuntaba a que las relaciones entre su viuda, Esther Doña, y sus hijos estaban más que rotas. Sin embargo, con el paso del tiempo, ambas partes lograron negociar discretamente un acuerdo que ha resultado especialmente ventajoso para Doña. La exmodelo vendió su parte del usufructo del histórico palacio a Tamara Falcó y su hermano Manolo por una cantidad nada desdeñable, que, según fuentes cercanas, sería de varios millones de euros. Una cifra que, aunque no alcanza los 7 millones por los que ahora se vende la propiedad, sí le permitió retirarse con la cabeza bien alta y el bolsillo lleno.
El Rincón: el palacio de los secretos que ahora vale siete millones
El Rincón, la finca de más de 160 años de historia, ha sido testigo de romances aristocráticos, visitas reales y hasta rodajes de cine. Situada entre Madrid y Toledo, esta joya arquitectónica es mucho más que una finca: es un símbolo del poder de la familia Falcó. Pero su valor emocional no ha sido suficiente para que Tamara lo conserve. A pesar de haber celebrado allí momentos emblemáticos de su vida, como cenas exclusivas y su boda con Íñigo Onieva, la marquesa ha decidido cerrar el capítulo y convertirlo en efectivo.
Según reveló la periodista María Eugenia Yagüe en El Mundo, Tamara Falcó y su hermano mayor, Manolo Falcó Girod, tomaron la decisión de comprarle a la viuda de su padre el citado usufructo. Asimismo, compraron las partes correspondientes de sus hermanos menores, Duarte y Aldara Falcó de la Cierva. La negociación entre la viuda y la hija de Carlos Falcó se llevó a cabo de manera fluida y sin contratiempos. De hecho, Tamara no dudó en destacar la actitud ejemplar de Esther Doña durante todo el proceso, afirmando: “Con Esther se ha llegado a un acuerdo y todos contentos. Esther se ha portado fenomenal”.
Esther Doña: de viuda cuestionada a millonaria silenciosa
Así que, aunque muchos la creyeron relegada, apartada del círculo noble tras la muerte de su esposo, lo cierto es que Esther Doña ha sabido jugar sus cartas. Solo tres meses después del fallecimiento del marqués, abandonó El Rincón sin hacer ruido y regresó a su piso de Majadahonda. Pero no lo hizo con las manos vacías. El acuerdo con Tamara y Manolo le garantizó una cantidad millonaria, suficiente para vivir cómodamente, lejos del escándalo y de las cámaras… por ahora.
Mientras tanto, Tamara Falcó ha optado por la rentabilidad. Aunque la finca genera ingresos por alquileres —alrededor de 30.000 euros mensuales, según se ha filtrado—, la venta parece la opción más conveniente. Para ella y su hermano, mantener El Rincón representa un verdadero quebradero de cabeza, por lo que han decidido aprovechar la revalorización del inmueble y su potencial económico, convirtiendo esta operación en una jugada financiera digna de Wall Street. Pero lo que más sorprende es que, en este negocio, la gran ganadora ha sido la que parecía tenerlo todo en contra: la viuda no querida, la mujer cuestionada, Esther Doña.