La maravillosa Ona Carbonell ha visitado el plató de La Resistencia de David Broncano, a raíz del documental Empezar de nuevo. La nadadora catalana, todo alegría, todo bondad y todo profesionalidad, ha estado este 8 de marzo y ha hablado de cómo conciliar ser buena madre y buena deportista. Un testimonio necesario de una de las mejores deportistas de la historia:
Ser madre y deportista de élite. Interesantísimo testimonio de @onacarbonell sobre la conciliación.
— La Resistencia miedo M+ (@LaResistencia) March 8, 2022
"No me sentía ni buena madre ni buena deportista" pic.twitter.com/MXGPh9XmHL
Carbonell está pasando por un buen momento profesional (de hecho, desde que empezó, no ha habido un mal momento), pero todavía más bonita es su vida personal. Hace unos días anunció, con una foto preciosa al lado de su primer hijo Kai, que nuevamente está embarazada. Está esperando su segundo hijo/a, por lo tanto, el pequeño Kai tendrá un hermanito/a: "la familia aumenta. Súper felices", escribía en redes con una imagen maravillosa de su hijo tocándole la barriga.
Ona Carbonell, embarazada de su segundo hijo / @ona_carbonell
Ona Carbonell con Pablo Ibáñez / @ona_carbonell
Fue a principios de agosto del 2020 cuando la deportista catalana anunció, a través de sus redes sociales, el nacimiento de su primer hijo, Kai, fruto de su relación con Pablo Ibáñez. Un precioso niño que nació en el Hospital Can Ruti de Badalona, en Barcelona. "Bienvenido al mundo", escribió la catalana en sus redes, en aquel tiempo, con una emotiva fotografía en blanco y negro donde aparecen tres manos: la suya, la de su pareja y la del recién nacido.
Ona Carbonell y su hijo Kai / @ona_carbonell
Todavía queda para repetir esta imagen, ahora con el dedo de su segundo hijo, pero lo ha hablado sólo pisar el escenario de Broncano, cuando el presentador de La resistencia la ha felicitado por su estado de buena esperanza. Han hablado del nombre de Kai, que en japonés significa 'océano'. Un nombre y un significado precioso. Broncano, haciendo de Broncano, bromea y le pregunta si buscó cómo se decía piscina en japonés, por si le convencía. "Imagínate que ahora 'Piscina' es un nombre precioso y te arrepientes...". Y Ona casi la pifia al revelar el sexo de su hijo/a: "...No..., pues... para...". Casi se le escapa. "...para el próximo", dice Broncano. "¿Sabemos ya si es niño o niña"?. "Sí... pero no te lo quiero decir", responde la nadadora. Broncano le pide que se lo apunte en un papel, que le haga el símbolo del género masculino o femenino. Ella coge papel y boli y lo hace.
Ona Carbonell y David Broncano / Movistar+
Si son buenos descifrando movimientos de la mano, quizás sabrán si Ona ha dibujado el círculo y la flecha inclinada hacia arriba a la derecha o la cruz hacia abajo. "Si el nombre japonés es bonito, ¿se podría plantear para este niño o niña, no?". Ona: "Exacto. Se podría plantear. A ver, Kai podría ser también para niña, ¿no?". Finalmente, encuentran la respuesta. Broncano: "Claro, en japonés puede ser unisex.... A ver, ojalá sea un nombre bonito...: hostia... 'Suimingupüru'". "Va a ser que no", reconoce ella al verlo:
Llega a ser MOTOMAMI y me da algo pic.twitter.com/vW7BVkHLJH
— La Resistencia miedo M+ (@LaResistencia) March 8, 2022
El niño/a que espera Ona no se llamará, pues, Suimingupüru Ibáñez Carbonell. Una pena. Original sería. Tendremos que esperar a saberlo. Escojan cuál escojan, seguro que es un nombre y un bebé precioso.