El cantante Miguel Bosé se está convirtiendo en el "caso Miguel Bosé". En tres días de 2019 ha hecho tres gestos que están haciendo hablar de lo que no quiere que se hable: su estado de salud. Primero publicó un vídeo donde aparecía demacrado, con un hilo de voz, mala cara y deseando buen año con un extraño "Hasta siempre".

miguel bose insta

@miquelbose (1 de enero 2019)

Al día siguiente Miguel Bosé se dio cuenta de la mala idea que había tenido con el vídeo y lo borró de su instagram. Él mismo reconocía así su error. Sus 500 mil followers no entendían qué estaba pasando y ahora vuelve con un segundo vídeo donde ya no sale ante de unas cortinas sino en una playa, pero con la misma mala voz y mala cara. Y encima, enfadado:

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

Mensaje para todos aquellos que se han preguntado miedo mí. #MB

En tabla|puesto shared by Miguel Bosé Oficial (@miguelbose) donde|dónde

Bosé vuelve a ofrecer un mensaje contradictorio "Estoy de vacaciones, tranquilo y feliz." La cara dice exactamente lo contrario. Y añade "No voy a contestar a ninguna tontería ¿vale?". El cantante se irrita por un vídeo que él mismo colgó y que todo el mundo que vio concidió en sentir preocupación por lo que le pasa a la voz del cantante. Aparte hay una persona como Nacho Palau que a pesar de no hablar con la prensa lleva a Bosé a los tribunales y destapa los problemas  deconvivencia de esta familia durante 25 años.

miguel bose par hijos

Bosé vive en México, alejado de todo pero no puede abstraerse de la acción de la justicia. Sabe que en España siempre ha sido noticia por lo que dice y por lo que no dice. La estrategia de hacerse el sordo con los cuatro hijos de la pareja, separarlos y hacer como que Nacho Palau no ha existido no parece que le esté dando buenos frutos. La justicia tendrá la última palabra.