Leo Messi está a las puertas de conseguir lo que se merece: ganar una Copa del Mundo. A muchas personas, también para servidor de ustedes, nos trae al pairo que gane o no gane el Mundial para considerar que él es el mejor jugador de todos los tiempos, el mejor futbolista de la historia, sin discusión. Pero sin embargo, nos haría enormemente felices si lo vemos levantar la Copa del Mundo el próximo domingo y así callar bocas a los que repiten el mantra de que para ser el más grande necesita un Mundial. La estrella argentina está haciendo un Mundial descomunal, y la guinda del pastel sería conseguir el título en la gran final. De momento, la albiceleste volverá a disputarla, como ya hizo Messi hace ocho años en Brasil contra Alemania. Esperemos que con mejor suerte. La selección argentina, de la mano del 10, pasó por encima de Croacia en las semifinales, 3 a 0, con un gol de Messi de penalti y dos de Julián Álvarez, el segundo suyo, tras una obra de arte de Messi, la mejor jugada de este Mundial, al hacerle un destrozo en las caderas del defensa croata Gvardiol.

No nos cansaríamos de verlo desde todos los ángulos posibles. El último vídeo es de la transmisión oficial que hicieron en Movistar+ con la narración de Carlos Martínez y los comentarios de Álvaro Benito. EN TVE también dieron el partido en directo. En su caso, la narración corrió de la mano del siempre discutido Juan Carlos Rivero con los comentarios del ex portero y capitán de la selección española y el Real Madrid Íker Casillas.

rivero casillas
Íker Casillas, con Juan Carlos Rivero y Javi Martínez / TVE

Y lo que ha quedado demostrado es que al de Móstoles todavía le deben escocer los 17 goles que le marcó Leo Messi cuando llevaba la camiseta del Barça. Porque en todo momento se le notó que le hacía tanta gracia que la Argentina de Messi ganara el partido como que le sacaran una muela. Primero, con el penalti que abrió el marcador para la selección sudamericana, un penalti de libro a Julián Álvarez que transformó Leo, pero Casillas, erre que erre insistiendo en que no lo era. E incluso, haciendo un tuit al respecto para sus seguidores.

Después, sin embargo, llegó el comentario donde se le vio el plumero, cuando en una jugada en el segundo tiempo, un tikitaka entre Messi y un compañero, acabó con un fuerte chut del argentino cerca del área pequeña que el portero croata Livakovic consiguió parar, evitando otro gol de Messi. ¿Y qué se le ocurrió decir a Casillas? "Menos mal que el portero croata la ha parado"... Instantes después, Rivero, que también las dice de padre y muy señor mío, como lo que dijo de Marruecos contra España, incluso tuvo que ser quien hiciera un comentario añadido: "Menos mal para Croacia". Los espectadores han destrozado a Casillas y le han dejado claro que a la hora de comentar un partido de Messi, se tape un poco:

Ojalá gane Messi la final del domingo. Se lo merece. Por él. Por sus compañeros. Por su país. Por los culés... Y por verle la cara que se les quedará a Íker Casillas y Juan Carlos Rivero.