En En Blau tenemos debilidad por una presentadora, guionista y humorista madrileña: Henar Álvarez. Si no la han visto haciendo monólogos, o no lo han escuchado en la radio, ya tardan. Es una de las mejores cómicas, por no decir la mejor, del país. Deslenguada, ocurrente, atrevida, rápida, brillante. Todo eso y mucho más es la colaboradora del programa de la Ser, Buenismo Bien, al lado de Quique Peinado y Manuel Burque y guionista de Las que faltaban en Movistar+. Se define como "cómica, guionista y bocachancla". Pero de su boca sólo salen verdades como puños.

Después de presentar durante un tiempo Días de cine, a Álvarez también la hemos podido ver en el programa Likes o colaborando en Late Motiv de Buenafuente con monólogos hilarantes. Azote del machismo más rancio y del machirulerismo, la humorista madrileña no tiene pelos en la lengua a la hora de hundir los comportamientos más ridículos de los hombres y a menudo habla abiertamente de sexualidad con un sanísimo y necesario punto de vista femenino cargado de una coña que hace añicos los convencionalismos.

La traca, el magnífico cómic que acaba de publicar hace poco, La mala leche, indispensable para reírse con las inquietudes erótico-festivas de una mujer que ha sido madre no hace mucho.

Henar con h, como se hace llamar en redes sociales, remarca que su nombre se escribe con la letra muda. Pero a quien no callarán es a ella. Y menos, abyectos cromañones que se han cruzado en su camino y se creen con el derecho de decir lo que les dé la gana a una mujer. Como le pasó a ella hace un tiempo, con un profesor. Explica la humorista que ella, de origen con el pelo rizado, un día decidió alisarse el pelo. ¿Qué le dijo el hombre? "Que estaba mejor así porque parecía 'más limpia'". Álvarez lo recuerda con finezza, y se dirige a él: "Hijo del gran putero, debería pasarte la nota con todas las planchas y mierdas que me he gastado en el pelo porque ahí empezó todo". Dedicado a este hijo del gran putero, Henar Álvarez con el pelo rizado:

Y por si este profesor con inquietudes estilísticas no tiene bastante, dos tazas:

Que Henar Álvarez sigue haciendo lo que le salga del moño, lo tenga liso o rizado, que aquí no nos cansaremos de verla, oírla y disfrutarla.