Tita Thyssen ha vuelto a Barcelona, su ciudad natal, para recibir un premio concedido por las Galerías de Arte de Catalunya. La baronesa ya planifica su Museo Thyssen en el paseo de Gràcia, en el antiguo cine Comedia, y eso la ha reivindicado como una gran mecenas también en su casa. Tiene museos en Andorra, en Sant Feliu, en Madrid, en Málaga y ahora también en Barcelona. El acto se celebró en el MACBA y Tita lució de blanco en un edificio totalmente blanco. Una experta en arte sabe que el color lo tienen que poner las pinturas de las paredes y no ella. En las fotos no solo destaca Carmen Cervera sino su hija mayor y heredera, Carmen, que se dejó fotografiar al lado de su madre como sucesora al frente del imperio Thyssen. La novedad es que también estaba el novio de Carmen, a quien ya ponemos cara y nombre. Es catalán, bastante mayor que la chica Thyssen y de buena familia: Ignacio Daniel Barquero de Llauder. Este:




Ignacio Barquero es arquitecto y tiene 27 años, casi diez más que la heredera Thyssen que solo tiene 18. Es hijo de José Daniel Barquero, consejero delegado del Grupo Thyssen Collection, hombre de confianza de la baronesa que ha colocado al hijo en el mejor lugar para gestionar las finanzas Thyssen: en el corazón de Carmen hija. La biografía del chico aparece en su Linkedin, hizo Arquitectura a la Universidad Politécnica de Catalunya y tiene un máster en MBA. Habla catalán y castellano y trabaja en dos firmas fundadas por él: Gaddex, que organiza acontecimientos para empresas, y Oktopus, estudio de diseño multidisciplinar que combina arquitectura, arte y cultura que colabora con el Museo Carmen Thyssen de Barcelona. Es el que se sentaba al lado de Isak Andic el día de la presentación del museo. Sabe posicionarse.



En el acto no estaban los otros dos hijos de la baronesa, Borja y Sabina, muy alejados del futuro del imperio Thyssen. Carmen, aunque ha dejado los estudios de ESADE en Sant Cugat para volver a Andorra, es la señalada como sucesora de Tita. Y el novio es catalán, como su suegra: "He nacido en Barcelona, es mi ciudad y he vivido aquí hasta que me casé con Lex Barker, que vivimos también en la Costa Brava, pero vivimos en el extranjero y también Heinrich, bueno, ha estado viviendo muchos años en la Costa Brava. He procurado nunca perder mis raíces, ellos han venido de mis raíces, que les ha gustado muchísimo, que somos una tierra preciosa". Tita ya ha dado el visto bueno al nuevo yerno, guapo, pijo e hijo del gestor de la fortuna. Y Carmen enamoradísima.