Operación Triunfo es un formato que, como su nombre bien indica, tiene como objetivo preparar a diamantes en bruto de la música para hacerlos brillar aún más y formarlos para la industria musical. Una experiencia única para cualquier persona a la que le guste cantar y se quiera dedicar a la música que, además, mezcla el formato reality con un canal 24 horas en el que podemos conocer a los concursantes, vivir las tramas que se forman a raíz de la convivencia haciendo que los espectadores conecten mucho más con ellos y se cree ese fenómeno fan que tanto identifica el programa. Cada año que empieza, el casting recibe millones de aspirantes que quieren vivir el programa, pero, sobre todo, quieren tener ese aprendizaje tan intenso y esa exposición. Sin duda, una de las ediciones más famosas y que tuvo un incansable fandom fue la del año 2017, donde conocimos a concursantes como Aitana, Amaia, Mimi (Lola Índigo), Miriam, Alfred García... y un largo etcétera. Con el tiempo, solo vemos brillar a los más famosos, pero, casi ocho años después, han salido a la luz otras historias de concursantes de aquella edición que esconden una realidad que, entonces, no conocíamos. Atentos.
Hace ya varios meses Thalía Garrido, actualmente Lyora Liss, rompió su silencio después de un año sin haber concedido ninguna entrevista, en el pódcast del periodista Arnau Martínez, Chico de Revista de Zona Rainpod, soltando titulares muy jugosos sobre su experiencia que desde EN Blau recogimos. Ahora, Arnau Martínez ha vuelto a recibir a un concursante muy querido de la edición de 2017, Agoney, quien se quedó a las puertas de la final siendo el undécimo expulsado y que posteriormente ha participado en Tu Cara Me Suena y en el Benidorm Fest en 2023. Es de Canarias, actualmente está de gira en solitario, solo tenía 22 años cuando entró en Operación Triunfo, y llevaba una carga emocional íntima muy delicada cuando entró al concurso y que ahora, años más tarde, ha explicado ante las cámaras: "Mucha gente cree que yo estaba enfermo de la voz, porque sí... Estaba muy mal de la voz, pero no por una cuestión física, sino psicológica, mi madre se estaba muriendo fuera, yo entré al programa sabiendo que le quedaba un tiempo limitado de vida a mi madre. Y me fui al casting porque ella me dijo: 'vas', y a día de hoy pienso, quizás no debería haber entrado para haber aprovechado más el tiempo con ella" ha explicado abiertamente, dejando al presentador y al resto de seguidores con un nudo en la garganta.
Agoney continuaba dando más detalles de cómo gestionó esta condición que dejaba atrás cuando entraba al concurso: "Mis problemas venían de ahí, porque nadie en la producción sabía eso, ni mis compañeros de OT, ni nadie de la producción, Noemí Galera tampoco, hasta llegado un momento en la academia, esto no está en cámaras obviamente, me voy, hablo con ellos, les cuento y hay un drama en esa habitación que yo lo destrocé todo, y destrocé la habitación de la rabia e impotencia de no poder hablar con ella". El silencio lo fue consumiendo por dentro, y Arnau Martínez le pregunta el motivo de no querer explicar nada: "No quería porque es televisión, yo venía de un pueblo, no había trabajado en televisión ni en un plató, la primera vez que pisé eso... me hice caca. Yo no quería que jugaran con eso, no quería ni dar pena en televisión, no quería que nadie pudiera hacer daño a mi familia con eso, que nombraran ese tema, no quería poner a mi madre en el foco" narra con toda la sinceridad.
Durante la entrevista también hablan de una clase de interpretación de los Javis donde se vivió un poco de tensión, seguidamente, también hablan de las críticas del público y, entonces, explica la dura experiencia que vivió en la gira: "Mal porque salíamos de Operación Triunfo e hicimos un concierto en el Palau, pero luego fueron en Gran Canaria y Tenerife, en el concierto me abuchearon, porque yo hacía una canción con Raoul, hacíamos Manos Vacías, que nos dábamos el beso y como no lo besaba... Estaba enfadado con la vida. Lo que más quería en el mundo se había ido, arrancamos la gira en Canarias, lo que más quiero no estaba ahí, mi familia no estaba ahí, estaba mi hermana, mi padre y poco más, y no los tenía ahí presentes cómo me hubiera gustado. (...) Lo único que quería era cantar rapidito e irme a mi casa, a llorar, y salía del escenario abucheado". La entrevista es de tres cuartos de hora y el concursante también habla abiertamente de algunos detalles de su relación con Raoul, con quien se dio un beso en la gala 7 del programa, y fueron uno de los dúos más famosos. Agoney también da detalles de la noche que tuvo que irse a urgencias porque tuvo un derrame vocal, e incluso reflexiona sobre el número de inyecciones que recibió.
Han pasado ocho años de aquella experiencia y ahora, Agoney, con treinta años, ya puede hablar abiertamente sobre sus vivencias sin tabúes ni misterios. Unas declaraciones que no han dejado indiferente a nadie, bravísimo.