Telecinco ha creado una nueva profesión: concursante de realities. Personajes como Sofía Suescun, Adara Molinero o Aída Nízar solo tienen sentido encerrados dentro de una casa, isla, piscina o manicomio de Telecinco. Existen derivadas: ser trabajadores del sexo. Cristian Suescun confesó que a los 33 años vive de eso. "¿Chapero?" gritaba Víctor Sandoval. "No, puto", se reía a Kiko Matamoros. Telecinco hacía públicas las tarifas de Suescun.
TARIFAS CRISTIAN SUESCUN:
-tarifa Only fans (para ver fotos suyas subidas de tono). 20 euros mensuales
-tarifa Masturbación (para exhibirse en videollamada practicante el onanismo): 600 euros ("Puedo cinco o seis al día")
-tarifa Sexo Oral (para dejarse practicar una felación por otro hombre): 10 mil euros
BENEFICIO MENSUAL ACTUAL: 6 mil euros (declarados a Hacienda)
La entrevista fue puramente profesional: "Me encanta el dinero y me encanta follar. Primero me he hecho el Only Fans (red social de fotos sexuales). Después quedaré con una actriz X que me introduzca en ese mundo. A mí me gustan las tías, pero al final es trabajo". No tiene problemas al practicar sexo con clientes masculinos y femeninos. Sandoval dice saber que el chico es bisexual. El programa difunde una conversación grabada negociando el precio con un hombre "¿Chupármela por mil euros? Ni hablar. Paga 10 mil. ¿Acabar de acompañante 24 horas, de escort? Poco a poco. Roma no se hizo en una hora. Yo me lo tomo como un trabajo". Sí, el más antiguo de la Humanidad.
La broma (María Patiño: "Diez mil euros por dejártela chupar") es que el joven madrileño quiere acabar en otro trabajo "Piloto de aviación. Primero de ultraligero y luego más grande". Los que están volando son los clientes y clientas de Suescun. Telecinco es una enorme casa de citas.