Marc Márquez está a punto de terminar un 2025 en el que todo le ha ido de cara. El piloto de Cervera ha vuelto a sonreír después de varias lesiones y esta temporada se ha proclamado flamante campeón de MotoGP de manera incontestable, pasando por encima de todos sus rivales en la gran mayoría de las carreras. Marc, que lo celebró con los suyos en una fiesta donde algunos echaron en falta más catalán, no solo está radiante en cuanto a su faceta profesional, sino que a nivel personal, no puede estar más feliz desde que comparte la vida con su pareja, Gemma Pinto. Bueno, no solo comparte vida. También tienen una casa, un casoplón, una mansión sencillamente espectacular y donde se les puede encontrar últimamente cuando tienen ganas de estar solos y relajados después de los muchos viajes que hacen.




Un pedazo de casa que antes de ser propiedad del '93' más famoso del motociclismo, fue propiedad de un exjugador del Real Madrid, el catalán Mariano Díaz. En la zona conocida como La Finca, en la capital española, una de las más exclusivas del país, las parcelas cuestan una barbaridad, millones, y su casa es una de las joyas de la corona, más de 1.300 m² construidos en diferentes plantas, siete habitaciones, diseño espectacular, con fachadas de hormigón visto, grandes ventanales y uso inteligente de la piedra. Como dicen en Expansión, "No es un palacete clásico, sino un búnker de lujo pensado para durar, con máxima seguridad, eficiencia térmica y privacidad total frente a miradas indiscretas". Piscina de dos alturas en el jardín, pasarela hacia la casa, y dentro, de todo.



Preside el salón una estantería gigante que cuelga de arriba abajo en una de las paredes, llena de elementos decorativos personales de la parejita, como cascos, trofeos, fotos de carreras o libros. Y cerca, una mesa de billar blanca, rodeada de alfombras suaves y detalles decorativos de inspiración africana. En cuanto a la cocina, si en el resto de la casa predominan los tonos blancos y piedra, aquí se observa cómo quien manda es la madera. Aquí es donde Marc y Gemma graban muchos de sus vídeos caseros, donde hacen cenas improvisadas con amigos, donde desayunan y donde cargan pilas y pasan buena parte de su tiempo dentro de la casa. También en el dormitorio, que se ha podido ver gracias a algunas de las publicaciones que hace Gemma, un gimnasio, o una sala con un gran espejo y toda clase de ropa.




Una casa espectacular, sin duda. Un casoplón digno de un campeón de MotoGP.