Albert Om y Joan Mª Pou se conocen desde hace mucho tiempo. Trabajaron juntos en El Club, dirigido y presentado por el primero y donde colaboraba el segundo, han compartido emisora durante muchos años (con Pou desde el primer día haciendo los partidos del Barça y con Om primero con L'hora del pati y después con Islàndia), pero sobre todo, son amigos. Se quieren, se ayudan, se aconsejan y pasan muy buenos momentos juntos. Una amistad de dos personas que se entienden, y a quienes les gusta mucho una buena conversación. Y desde hace poco, unas conversaciones que han pasado de la parte privada a la pública, con un pódcast de nueva hornada imprescindible de las charlas deliciosas de dos comunicadores de la cabeza a los pies: 'Què t'ha passat?'.

Un título que no ofrece lugar a dudas, qué te ha pasado. Una conversación en torno a las cosas que les han pasado a este par, que tiene lugar en la coctelería del restaurante 'Jok' de la calle Mallorca de Barcelona, que se hace con público y que tiene como objetivo hacer que los seguidores pasen un gran rato y se queden con los ojos como platos por lo que explican Om y Pou. De momento, ya se han hecho cuatro pódcast, y los dos protagonistas emplazan al personal a que vean los programas enteros y no se queden solo con algunas anécdotas sensacionales que explican en Què t'ha passat? y que se comparten en la red. Nos sumamos a esta petición, pero de momento, les dejaremos una cata de una de las últimas intervenciones donde Om ha explicado una situación que ha hecho alucinar a su partenaire.

A la pregunta inicial de Que te ha pasado?, el presentador le revela que al mediodía ha ido a comer con una amiga a uno de los muchos restaurantes que hay en la parte de arriba de la Diagonal de Barcelona, al otro lado de la Illa Diagonal. Han ido a comer en una terraza de uno de estos restaurantes. ¿Y quién había justo en la mesa de al lado?... "Tres mujeres rubias, rubísimas, pijas, pijísimas". Él iba mirando de reojo y en un momento dado, "veo que una de ellas tenía un mechero con la bandera española... y unas letras. ¿A ver qué pone?: y ponía 'Me gusta la fruta'". Un mechero, más o menos, como este:

mechero espanya me saborea la fruta bandera
 

Recordad que eso es lo que la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, dijo que dijo en una sesión en el Congreso de los Diputados al oír al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, hablando de corrupción. Una frase, "que Ayuso se inventó que había dicho por no decir 'Hijo de Puta' a Pedro Sánchez".

Om y la amiga acaban de comer, y él, pillo, "digo... fumaré". Y le pide "¿me puedes dar fuego, por favor?" a la mujer del mechero tan patriótico de al lado. "Me pasa el mechero, hago ver como si no viera nada, me enciendo el cigarro, se lo devuelvo, le digo 'Gracias'"... ¿Y qué hizo ella?: "Se pone a reír", como si hubiera reconocido a Albert Om, "y le da un beso al encendedor...". Pou alucina: "¿¿¿Qué dices, Albert??? ¿¿¿Pero cómo te pasan estas cosas???". Y él: "Te lo juro. Un beso que yo he interpretado como queriendo decirme: 'Escucha, no te pienses que este mechero me lo acabo de encontrar ahora en el suelo', quiero decir, aquí hay una militancia". Pou interviene para hablar de esta generación que les enseñaron a no hacerse entender fuera de casa y a no decir según qué, sobre todo en cuestiones políticas.

Una conversación sensacional. Escúchenla entera, vale mucho la pena.