Hace tan solo unos días, Kate Middleton se presentó en la primera recepción diplomática en el Palacio de Buckingham. Luciendo radiante y sonriente, la princesa de Gales comenzó con su plan maquiavélico para acabar, o por lo menos opacar, a su enemiga: Meghan Markle. Para ello, la esposa del príncipe William ha decidido seguir las recomendaciones de Carlos III y no se ha inmutado ante el estreno del documental de Meghan y Harry, enfocándose así en su agenda oficial y en sus responsabilidades con la Corona, ganándose el cariño del pueblo británico y la admiración de los estadounidenses, dado que causó una muy buena impresión durante su visita a Boston.  

Además, los miembros de la Familia Real decidieron cambiar la fecha de esta recepción, iniciando un juego de contraprogramación entre Kate y Meghan, dado que el evento en el Palacio coincidió con la entrega del premio ‘Ripple of Hope’ de Harry y Meghan, galardón con el que fue premiada su valentía por haber denunciado públicamente los actos “racistas” de la Familia Real británica contra Meghan Markle, además de las iniciativas de su fundación ‘Archewell’. Este premio fue entregado por Kerry Kennedy, presidenta de la fundación Robert F. Kennedy. De esta manera, Kate y Meghan protagonizan una guerra mediática en busca del apoyo y la receptividad de sus seguidores.  

Para esta recepción, que se celebra todos los años en diciembre, pero que se había cancelado en 2020 y 2021 por la pandemia, Kate Middleton lució un vestido imponente en color rojo, el modelo Elodie Gown de una de sus diseñadoras preferidas, Jenny Packham. Se trata de un vestido de mangas largas, cuello barco y apliques de pedrería fina. La princesa de Gales complementó su atuendo de gala con unos pendientes de diamantes que pertenecían al joyero de la reina Isabel II y una tiara de flor de loto que perteneció a la princesa Margarita, hermana menor de Isabel II. Además, también lució su banda azul de la Orden Real Victoriana, un símbolo que demuestra su posición en la Familia Real como futura reina consorte.  

Kate Middleton
Kate Middleton

Kate en Inglaterra, Meghan en Estados Unidos 

Definiendo las fronteras de cada uno de sus dominios, tanto Kate Middleton como Meghan Markle hicieron todo lo posible por convertirse en el centro de atención en sus respectivos eventos. Mientras Meghan recibía un premio por hablar del supuesto racismo que sufrió por parte de la Familia Real, dejando muy mal parada a la monarquía británica, Kate se dedicó a brillar y enaltecer la imagen de una institución milenaria, ganándose el apoyo del pueblo británico por sus acciones y no por sus escándalos.  

En esta recepción, el rey se encarga de recibir a los embajadores extranjeros en los salones del Palacio de Buckingham. Este evento suele contar con 2.000 invitados y se realiza para celebrar la presencia en Londres de uno de los cuerpos diplomáticos más grandes del mundo. De esta manera, Kate Middleton y el príncipe William se unieron a Carlos III y a Camilla, convirtiéndose en los anfitriones de la velada.