Además de pertenecer a uno de los clanes familiares más famosos del mundo, tanto Kendall como Kylie Jenner comparten otras pasiones fuera del entorno del modelaje, la belleza y el mundo del fitness. Se trata de su pasión por los coches de lujo. Ellas, al igual que su hermana Kim Kardashian, son amantes de los coches de lujo de las firmas más prestigiosas del mercado automotriz, entre ellos: Mercedez-Benz, Bentley, Lamborghini y por supuesto, la icónica firma del ‘Cavallino Rampante’, Ferrari.

A pesar de que cuentan con varios coches de diversas firmas, las hermanas Jenner han demostrado que una de sus marcas favoritas es Ferrari, dado que ambas han comprado el mismo modelo de coche, pero en distinto color; como si se tratara de un vestido o un par de zapatos que les haya gustado a ambas. Además de comprar un coche de lujo, las Jenner han logrado adquirir un símbolo de solvencia, estatus y buen gusto, ya que los compradores de esta marca no eligen Ferrari, sino que Ferrari los elige a ellos.

Kylie y Kendall Jenner
Kylie y Kendall Jenner

Las famosas hermanas Jenner se decantaron por el modelo Ferrari 458 Spider, siendo uno de los mejores ejemplares de la casa italiana en los últimos años debido a su diseño aerodinámico. Este modelo cuenta con un motor central de 8 cilindros colocados en ‘V’ y también tiene 32 válvulas de inyección interna, estas válvulas le permiten una potencia límite de 570 CV a 9000 revoluciones por minuto. Además, cuenta con una caja automática de siete velocidades en modo secuencial. Este magnífico coche está valorado en más de 274.000 euros y es uno de los coches más buscados por las celebridades.

Según reveló Kendall Jenner, la compra de estos coches sucedió el mismo día, pero no fue planeado. “Seguramente han visto los snaps de Kylie de nosotras comprando Ferraris, pero la historia detrás de eso es muy buena – ¡no estaba planeado en absoluto!”, escribió la modelo en sus redes sociales. “Luego de conducir un Ferrari 458 a principios de este año, sabía que necesitaba uno para mí. Entonces, esperé mientras mi amiga buscaba uno que lo trajeran a los Estados Unidos”. Lo que Kendall no sabía, es que su hermana también quería hacerse con el mismo modelo de Ferrari. “Cuando había un modelo aquí, lo fui a ver con Corey Gamble. Luego, vi a Kylie y me dijo que estaba planeando comprar uno también. Pensamos que era cool estar las dos conduciendo lo mismo,” dijo la modelo.

Continuando con la historia, Kendall Jenner afirmó lo siguiente: “Un día, estaba desayunando con mi amigo y me dijo que había uno (un Ferrari 458 Spider) al final de la calle y que tenía que verlo. Finalmente estaba lista, así que lo compré en el momento. Hablé por FaceTime con Kylie diciendo, ‘¡Mira lo que me compré!’ Le dije que vaya a ver el otro, que era local. ¡Me encontré con ella allí mientras lo estaba comprando! Luego tomamos todos esos snaps. Fue gracioso que los terminamos comprando el mismo día, porque fue tan espontáneo”, contó Kendall Jenner.