Mario Vargas Llosa dice que Isabel Preysler y Tamara Falcó viven de la prensa y los medios de comunicación. Se han convertido en dos personajes públicos, especialmente la marquesa de Griñón, que desde que participó en ‘MasterChef Celebrity 4’ su vida parece un reality. De hecho, el año pasado protagonizó uno con Netflix.
Tamara Falcó ha sido noticia casi todos los días en estos últimos meses. Primero por la infidelidad de Íñigo Onieva, el anuncio del compromiso, la posterior ruptura, y ahora por su reconciliación y su futura boda. La pareja anunció que retomaban su compromiso en el punto en el que estaba cuando rompieron. Se casarán el próximo mes de julio en el palacio ‘El Rincón’, propiedad de ella misma y de su hermano. Íñigo y Tamara ya están preparando este día tan especial y cuentan con el apoyo de sus respectivas madres, Isabel Preysler y Carolina Molas.
Competencia entre Isabel Preysler y Carolina Molas
Isabel Preysler se entretiene asesorando a su hija ahora que ha roto con Mario Vargas Llosa y por primera vez en muchos años está soltera. Centrada en sus hijos y en sus nietos. Sin embargo, no le hace tanta ilusión que Tamara Falcó haya vuelto con Íñigo Onieva. El empresario la traicionó y no se fía de él. Si su hija es feliz no tiene más remedio que aceptarle, pero ya le ha advertido que no le piensa pasar ni una.
Todas las cámaras estarán pendientes de Tamara Falcó. Éste será el evento de la década. No obstante, también se fijarán en el estilismo de Isabel Preysler, otra de las grandes protagonistas. Sin embargo, éste tiene mucho miedo porque la madre de Íñigo Onieva podría eclipsarla. "Me trasladan que Isabel Preysler está inquieta por el protagonismo que pueda tener o no en la boda de su hija", desveló Marisa Martín-Blázquez en Fiesta.
Pero no es esa solo su única inseguridad. "Isabel está tensa con el protagonismo que pueda tomar la madre de Íñigo sobre ella. Siempre se ha preocupado por ir perfecta”, comparte la periodista. Desde luego en esta ocasión Isabel Preysler va a quedar totalmente relegada a un segundo o tercer puesto. La elegancia de Carolina Molas, y el protagonismo que ha adquirido en estos últimos meses, no está pasando desapercibida.
Por ahora, Carolina Molas no tiene el vestido que llevará en un día tan importante para su hijo. Isabel Preysler tiene todo el tiempo del mundo para su estrategia.