Javier Bardem es hoy el actor español más reconocido internacionalmente, pero llegar ahí no parece haber sido fácil. Ni laboralmente, ni familiarmente.
En una entrevista a la revista norteamericana Esquire, Bardem ha relatado la "infancia complicada" que sufrió por la ausencia de su padre, un hombre de un carácter muy complicado, con el que el actor estuvo "enfadado" durante muchos años.
De hecho, sólo ha hablado de él en público una vez, en el año 1996, para recoger su Goya por el filme Boca a Boca. Su progenitor había muerto un mes antes.
También Pilar Bardem, madre del Oscar al mejor actor secundario por No es país para viejos, se ha referido alguna vez a su marido. "De él sólo veía unos prontos violentos, irracionales, cada vez menos espaciados entre sí. Una voluntad caprichosa y despótica", ha confesado.
Con esta situación, cuenta Javier Bardem, "mi madre recorría España entera mientras mi hermano [Carlos, también actor] y yo no teníamos comida, agua caliente o luz".
Los hijos con Penélope
Bardem también se ha referido a sus hijos, Leo y Luna, que ha calificado de increíbles". "Lo que más me gusta es pasar horas y horas jugando a princesas y dragones con ellos y con mi mujer [Penélope Cruz]", confiesa.
La entrevista de Bardem a Esquire ha sido recibida con recelo por parte de la prensa española, que hubiera preferido a que hablara en medios de su país de origen.