La devoción de la ex reina Sofía hacia la Iglesia ortodoxa siempre ha sido evidente, siguiendo fielmente los preceptos que vinculan a la corona con el catolicismo. En contraste, la reina Letizia ha mostrado un escaso interés en las tradiciones católicas, lo que ha generado descontento entre los conservadores eclesiásticos. Su ausencia en eventos religiosos importantes ha sido interpretada como un desdén hacia la fe cristiana que ha caracterizado a la monarquía española.

Desde su ascenso al trono, Letizia ha exhibido un enfoque más contemporáneo y una aparente indiferencia hacia la religión católica, lo que ha provocado tensiones con la Iglesia. Su postura contraria a las creencias católicas ha generado preocupación entre los eclesiásticos, especialmente en lo que respecta a la educación religiosa de la princesa Leonor, heredera al trono.

La Iglesia ve a la princesa Leonor como un instrumento para mantener viva su influencia en España

La Iglesia considera que la educación religiosa de Leonor es fundamental para preservar la identidad católica de España. Por ello, aboga por una formación tradicional y católica para la princesa, temiendo que la influencia de Letizia pueda alejarla de las creencias arraigadas en la sociedad española.

Letizia Leonor EP
Letizia Leonor EP

Al igual que su madre, la princesa Leonor es laica y no suele participar en prácticas religiosas como santiguarse, lo cual incomoda a los altos cargos de la institución católica. Por mencionar episodios recientes, su ausencia en eventos religiosos, como la omisión de una ceremonia centenaria celebrada a principios de marzo en la Basílica del Cristo de Medinaceli, así como su aparente falta de interés en eventos como la Semana Santa, también genera preocupación entre los líderes eclesiásticos.

La Iglesia considera que la fe de Leonor es reconducible

Desde la Iglesia temen que Leonor se aleje de la tradición religiosa española, sugiriendo que la influencia de su madre podría ser negativa en su educación. Por tanto, se busca garantizar que la princesa reciba una educación religiosa adecuada, libre de las influencias de Letizia, y se insta a que mantenga una conexión sólida con las creencias y valores católicos del país. Como si alejarla de su madre fuera a propiciar una fe repentina por parte de Leonor. Como cuando en la institución consideraban que la homosexualidad era una enfermedad y podía corregirse con tratamientos.