De forma más discreta, Zarzuela ha celebrado el cumpleaños de Felipe VI. El pasado 30 de enero, el rey cumplía 56 años, en una de las celebraciones más tristes que se recuerdan hasta la fecha. A diferencia de Juan Carlos, los actuales reyes son mucho más austeros, no quieren hacer grandes gastos, y menos en cosas totalmente innecesarias. En los últimos meses, la familia se ha reunido al completo para celebrar los cumpleaños de Leonor, la reina Sofía, Irene Urdangarin, la infanta Elena o Juan Carlos. Sin embargo, al de Felipe no ha acudido nadie.
Felipe tenía programadas varias recepciones en Zarzuela esa misma mañana, un total de tres. Sin embargo, a las dos de la tarde su agenda se liberaba y tendría total libertad, además estaba en casa. Por ello, aprovechó para cambiar el menú y celebrar un almuerzo más especial con motivo de su cumpleaños. Tan solo reunió a la reina Sofía, Irene de Grecia y Letizia, a regañadientes. Entre la emérita y la reina no hay una excelente relación. Ni aparecieron sus hermanas Cristina y Elena, ni su colección de sobrinos, tampoco sus hijas, que se encuentran fuera de Madrid con sus respectivas formaciones.
La tía Pecu almorzó con la reina Sofía, Felipe y Letizia
Además, la tía Pecu, muy querida por Felipe, no atraviesa su mejor momento, pero no quieren dejarla sola. La hermana de la reina Sofía sufre Alzheimer y en estos momentos su estado es muy delicado. Ya tiene olvidos muy importantes y ha sufrido un deterioro cognitivo. Es la hermana más pequeña, pero parece la mayor. Pocas veces sale de casa, siempre va acompañada del brazo de Letizia, muy preocupada por la salud mental. Recibe atención médica a diario para que la enfermedad vaya muy lenta, y tiene personal a su servicio las 24 horas del día.
Los reyes quieren proteger a la tía Pecu, es una persona muy querida por los hijos de Juan Carlos. Desde hace cincuenta años vive en Zarzuela, prácticamente ha crecido con ellos y es como una segunda madre. Ya no querían celebrar la fiesta fuera para que no la viesen las cámaras y para evitar desplazamientos innecesarios. En palacio no hay ningún problema. Fue una reunión familiar muy delicada y triste. Quedó totalmente deslucida.
