La tía Pecu ha sido el principal apoyo de la reina Sofía en sus momentos más duros. Ahora es la emérita quien se ha volcado en su hermana tras sus problemas de salud. Irene de Grecia se instaló en Zarzuela hace cincuenta años. Venía para un par de días pero finalmente se quedó para siempre al quedarse soltera. Podría haber sido una pretendienta de Juan Carlos, pero finalmente se decantó por la madre de Felipe, Cristina y Elena. La cuñada del exmonarca ha sido como una segunda madre para sus tres sobrinas. No se ha separado ni un solo día de los Borbón.

La reina Sofía se ha enfrentado a problemas de extrema gravedad. Ha soportado las humillaciones y traiciones de Juan Carlos y aún así se mantuvo fiel a la corona porque creía que esa era su misión. También a las de su hijo Felipe. Ha visto como la familia se ha partido en dos, algo que no tolera una persona tan tradicional y familiar como ella.

infanta Cristina y reina Sofia
infanta Cristina y reina Sofia

La emérita siempre ha estado en los buenos momentos de la familia, pero también en los malos. Cuando necesitaba llorar y desahogarse, Irene de Grecia siempre estaba con ellos. Como por ejemplo cuando afrontó la muerte de María de las Mercedes, madre de Juan Carlos, a quien ayudó a soportar su grave problema con el alcoholismo fruto de una profunda depresión por el fallecimiento de uno de sus hijos, Alfonso, por un accidente mientras jugaba con el exmonarca.

Sofía ha cuidado de toda la familia, incluido de la madre de Juan Carlos, su suegra, aunque no fuese nada suyo. Siempre se ha dado a los demás, a priorizado a todos antes que a ella misma. Según Pilar Eyre, María de las Mercedes de Borbón y Orleans “era una mujer valiente, moderna, muy estricta en el protocolo y una reina de los pies a la cabeza, aunque no llegara a serlo, pero sobre todo era bondadosa”.

María de las Mercedes tenía la oportunidad de asumir el papel de reina, pero esto no llegó a ocurrir. La periodista sostiene que habría desempeñado un papel destacado como monarca debido a su sentido de la dignidad y el compromiso con la dinastía. Sin embargo, los honores fueron otorgados a su hijo, Juan Carlos I.

María de las Mercedes se refugió en el alcohol tras la muerte de su hijo 

La madre del rey emérito ha llevado consigo una carga emocional considerable desde la trágica pérdida de su hijo Alfonso, a manos de otro de sus hijos, Juan Carlos. La fatalidad ocurrió con un disparo en la sala de juegos, marcando un episodio que nunca pudo superar y sumiendo su vida en la oscuridad. La profunda depresión se apoderó de ella, y, según comenta la autora, al escribir sobre su vida, se revelaron momentos difíciles que la emocionaron profundamente.

Tia Pecu GTRES
Tia Pecu GTRES

La abuela de Felipe se sumió en el alcohol como refugio durante ese oscuro período. Aunque se intentó mantener este episodio en secreto, la autora decidió abordar estos pasajes en la biografía. Se tomaron medidas para ayudarla a superar la adicción, pero era inevitable que las botellas ingresaran camufladas, incluso dentro de los libros, en la residencia real.

Los asesores de Don Juan tomaron la decisión de abordar este problema como una enfermedad y buscaron la intervención del doctor López Ibor para ingresarla de inmediato. La autora reconoce que ha sido difícil obtener más detalles, ya que quienes vivieron esa época han guardado silencio en un pacto hermético de silencio. A pesar de las dificultades, la reina Sofía permaneció al lado de su madre en todo momento.