Los Borbones no pueden ver a Letizia. Y Letizia no puede ver a los Borbones. La relación es tirante en las dos direcciones. No hay que repasar los incontables momentos en que la reina ha expresado públicamente su ira por sus suegros o cuñadas. Si fuera por ella, no se reuniría con su familia política ni por la comida de Nochebuena. Pero es la reina y tiene que hacer el paripé en algún acto público. Lo que sí está consiguiendo Letizia es distanciarse cuanto más mejor de algunos familiares.
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Hace siglos que no se la ve al lado del rey Juan Carlos. Y cuando lo hace, parece como si disfrutara haciendo sufrir, por ejemplo, al rey emérito. De hecho, en la reunión por los 80 años de la reina Sofía, se escribió que fue ella quien obligó a que se viera una foto de familia en la que se veía a Juan Carlos tullido y con un pie torcido: "la foto es una mala jugada para El Jefe. Se ve claramente que le ocurre algo en la pierna. Al final, la que decide qué foto se manda a los medios es ella -la Reina Letizia- y podría parecer que lo hace aposta para que todo el mundo vea cómo se encuentra su suegro".
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Con su cuñada, la infanta Cristina, ya ni se esconde. Desde el ingreso en la prisión de Iñaki Urdangarin que ya ni hace el esfuerzo por parecer que son amiguis. No se soportan. Con la otra hermana del rey Felipe, la infanta Elena, la cosa no está tan tensa. En parte, porque aunque la mayor de los hermanos es una defensora acérrima de su padre, es la más fiel a respetar 'la institución' y tiene muy asumido que tiene que dar todo el apoyo que pueda a la Familia Real, aunque Letizia y Juan Carlos no puedan ni verse.
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Pero lo que la acritud de la relación entre los Borbones y la asturiana ha separado, lo ha unido la dulzura de los pasteles y las pastas. Porque a Letizia y Elena las une la comida. No los festines que la infanta hace con su padre, sino la comida 'healthy', saludable, de la cual las dos son unas defensoras espartanas, Leti, incluso, una "Freak Control" como la han bautizado algunos. Explica Vanitatis que las dos piensan lo mismo sobre nutrición y alimentación, practicantes convencidas. Nada de grasas, cero frituras, poca carne, mucha verdura y fruta y bollería, la justa, y hecha en casa. Elena, incluso, acostumbra a llevar bizcocho o pasteles hechos por ella a las visitas que hace. Habrá que ver, sin embargo, si entre ella y Letizia se llaman para compartir recetas. Tiene pinta de que no. Su alimentación puede ser healthy, pero la relación entre Letizia y los Borbones es claramente unhealthy.