La infanta Cristina estaba muy enamorada de Iñaki Urdangarin. Tardó en quitarse la alianza. No lo hizo hasta que se firmó oficialmente el divorcio. La hermana de Felipe VI aún tenía esperanzas de que el exjugador de balonmano volviese con ella. Pensaba que su relación con Ainhoa Armenia sería un nuevo capricho, como han sido otras, y siempre le ha perdonado, no le hubiese importado. Pero se ha dado cuenta demasiado tarde de que eso no sucederá. La hermana de Felipe VI sufrió mucho con esta separación. No solo por sentirse humillada y traicionada, sino por una familia rota y muchos años de relación a la basura.

Infanta Cristina / EFE
Infanta Cristina / EFE

Cristina acudió a psicólogos para superar este episodio de su vida. Necesitó ayuda. También el apoyo de sus cuatro hijos. Lloraba desconsoladamente, ni tan siquiera salía a la calle si no la obligaban, tampoco se arreglaba. Ahora es una mujer completamente nueva, más radiante y feliz. Aunque cuando empieza a salir de una montaña se ve inmersa en otra. Y es que ahora mismo su máxima preocupación son sus padres.

La hija de la reina Sofía adquirió el año pasado una nueva vivienda en Barcelona para volver a sus orígenes. Ahora mismo está en reformas. Se espera que vuelva de forma permanente en unos años, cuando fallezca Juan Carlos I porque de esta forma podrá evitar su multimillonaria herencia de la Hacienda Pública. Pero tiene el deseo de estar más cerca de ellos, tanto del emérito como de la emérita. Los dos tienen ya 87 años y es una edad muy avanzada que acarrea graves problemas de salud.

La infanta Cristina está preocupada por la salud de sus padres 

Juan Carlos I tiene serios problemas de movilidad y principio de demencia senil, los médicos ya le han comunicado que acabará en una silla de ruedas. La parte más mala es que vive a miles de kilómetros aunque visite España constantemente. No quieren que muera solo y no logran convencer a Felipe VI.

Por otro lado la reina Sofía ha recibido duros golpes con el fallecimiento de su hermano Constantino de Grecia a causa de un derrame cerebral y la enfermedad de Irene de Grecia. Se ha quedado totalmente sola y triste. Los tres hermanos se turnan para mantenerla ocupada y entretenida.

Pablo Urdangarin es quien más contacto tiene con Iñaki Urdangarin y le ha comunicado que la infanta Cristina no está bien, se está viendo muy afectada por la salud de sus progenitores. El exduque de Palma ya no mantiene una relación con ella pero le tiene un gran aprecio por todos los años que han estado juntos y se preocupa, hay que decir que el exjugador de balonmano tiene relación directa con el emérito.

Juan Carlos y la reina Sofía conversando / EFE
Juan Carlos y la reina Sofía conversando / EFE