La monarquía española tiene muchas cosas. Dinero, por descontado. Los bolsillos a manos llenas, y si no, que se lo pregunten al rey Juan Carlos después de años y años llenándoselos de manera descarada y todos los palmeros mirando hacia otra parte, por no hablar de la justicia española y los medios pelotas que cuando se trata de los escándalos financieros del campechano hacen como si no existieran.

Pero a los Borbones también les llenan de regalos por tierra, mar y aire. Legiones de monárquicos de todo el país les hacen llegar objetos de diferente procedencia, dudoso gusto y utilidad todavía más dudosa. Centenares de asociaciones, de casas reales, de monárquicos que le hacen la rosca a Felipe y Letizia, en definitiva, regalan cada año centenares de objetos, la mayoría pongos de primer nivel, en sus visitas oficiales.

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Letizia, recibiendo un regalo / GTRES

Para tener contentos a los reyes y a sus hijas, muchos se las ingenian para tratar de ser los más originales y que los reyes hagan uso de sus obsequios en lugar de dejarlos en el baúl cogiendo polvo. Esta voluntad servil ha hecho que cada año lleguen a Zarzuela joyas, alfombras hechas a mano, bonsais de olivo, cascos de moto, zurrones de pastor, ajedrez con figuritas de soldaditos, platos de cerámica, pins, llaveros, gorras, pañuelos, cuencos, juegos de té, peluches, collares, relojes o bicicletas, a repartir entre los reyes y sus hijas.

Antes de que Juan Carlos se marchara con la cola entre las piernas hacia su retiro dorado en Abu Dhabi, el emérito también mojaba, y de qué manera. En negro, en especias, en cenas, en todo... Pero de todos los regalos que le han hecho llegar a juancar desde que accedió al trono, hay un no-regalo que no tiene, y que si alguna vez ve la luz, dejaría a los Borbones temblando, por lo visto.

Juan Carlos I / ACN

Juan Carlos I / ACN

Una de las personas que más sabe de la monarquía española, amiga de los monarcas, es la escriptora y periodista Pilar Urbano. Ha escrito numerosos textos y libros sobre los Borbones, pero en una entrevista en la revista Diez Minutos le ha confesado a Rosa Villacastín que tiene un libro escrito, "que no he publicado, y el Rey Juan Carlos sabe que no lo he publicado". Un libro que un día le dijo a Juan Carlos: "Señor, le voy a hacer un no regalo, que es un libro no publicado, que tiene 3.367 archivos digitales. Este libro está comprometido con una editorial, pero no lo voy a publicar porque no quiero hacerle daño a la Reina Sofia, no quiero hacerle sufrir más".

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Pilar Urbano / Cuatro

¿Qué sale? Lo que se sabe, según la pregunta que le hace el citado medio ("¿Tan explosivo era su contenido?"), es que es sobre "el lado más oscuro del Rey. Yo sabía que 10 días después le iban a operar del corazón, y él había iniciado ya un camino de retorno a sus orígenes, porque él quiso en ese momento reconciliarse con la reina Sofía. Es cuando empieza a atender las necesidades de sus nietos, en un intento por rehacer su vida familiar". Un libro, pues, que si alguien de la editorial decide filtrarlo o que se publique, sería un verdadero escándalo, según su propia autora.

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Juan Carlos, "lo siento mucho, me he equivocado, no volverá a ocurrir" / Telecinco

Cuando eso pasó, coincide en el tiempo con la mítica frase de "Lo siento mucho, me he equivocado, no volverá a ocurrir", después de la escapada a Botsuana con Corinna a cazar elefantes. Pero este intento de rehacer su vida familiar ya había llegado al punto de no retorno. Dice Urbano: Ese retorno familiar necesitaba algo más que una frase. Cuando yo le entrego ese libro al Rey, lo hago porque no soy una rompepatrias. Así se lo dije al conde de Fontao, un día que vino a verme".

Una rompepatrias... Imaginen qué debe decir el libro para poder romper la patria... Con la de patriotas que hay en España que se llenan la boca de rojigualda a la mínima de cambio, seguro que la llave del baúl donde se guarda el explosivo libro está enterrada en las profundidades del océano.