La entrada de la reina Letizia en la monarquía lo cambió todo en la casa real. La consorte ha intentado acabar con el hermetismo, haciendo ejercicios de transparencia que permitieran reconducir la imagen malparada que dejó el rey emérito Juan Carlos I y otros miembros de la familia real como la infanta Cristina cuando fue acusada de estar involucrada en el caso Nóos, Froilán cuando ha protagonizado cuestionables comportamientos en público, o los planes de vida sin pegar un palo al agua de Victoria Federica.

Una mejoría de imagen que en la casa real pretenden continuar con la princesa Leonor. Los altos cargos de palacio y Letizia han trabajado duro para construir una Leonor más cercana al pueblo. Una estrategia que únicamente busca normalizar la presencia de algo tan medieval como la monarquía en el siglo XXI, garantizando así la continuidad de la realeza en un contexto histórico en el que pinta muy poco y tiene poca razón de ser.

La casa real trabaja en construir una Leonor más cercana al pueblo

No obstante, parece que en la casa real no están consiguiendo su objetivo. Leonor es admirada por las generaciones españolas más antiguas, pero no está calando en las nuevas, que son las que tendrán que sufrir su reinado.

Leonor y Sofía
Leonor y Sofía

Leonor, a juzgar por lo que se ve desde fuera, se aleja de la imagen casposa que durante décadas ha emitido la monarquía. Desde que está en la Academia Militar de Zaragoza, Leonor denota una imagen desenfadada. Estar lejos del control de su madre y de Zarzuela le ha sentado de maravilla. La princesa ha sido vista disfrutando de una vida social más activa y relajada, asistiendo a fiestas y discotecas hasta altas horas de la madrugada en las que también cae alguna que otra bebida animosa, desafiando así las expectativas tradicionales asociadas a la realeza.

Leonor genera animadversión entre las nuevas generaciones

Sin embargo, afirman numerosas fuentes que la cosa cambia en las distancias cortas. Apuntan que la princesa se cree más que nadie y eso a veces le ha traído problemas con jóvenes de su edad.  Especialmente en noches en las que sale, en las que ha generado algunos conflictos.

Leonor y su móvil Instagram
Leonor y su móvil Instagram

Leonor incluso ha sido recriminada y abucheada por presentes en locales de ocio, que se han visto condicionados por la masiva presencia de escoltas y su excesivo control para evitar que se filtraran imágenes comprometedoras. Se han llegado a registrar bolsos y a requisar teléfonos móviles para evitar cualquier toma de fotografías. Sobre todo en las zonas de los baños. Escoltas que incluso han tenido que intervenir para calmar los ánimos.