La localidad francesa de Bidart ha sido un año más el escenario escogido por la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin para pasar los últimos días de vacaciones. A la espera de la sentencia del caso Nóos, los exduques de Palma apuran el verano en la casa de la madre de Iñaki, Claire Liebart, al lado de sus cuatro hijos.

Fuera del foco mediático y judicial de Mallorca, las playas del País Vasco francés son un destino más plácido para la familia. En ellas, se camuflaron como unos turistas más para pasar desapercibidos. La revista Love ha sacado en exclusiva unas imágenes donde se ve una Cristina de Borbón más afinada, luciendo un sencillo bañador azul en sus días de descanso.

Después de un verano en que la infanta Cristina por temas relacionados con el cambio de vivienda de Suiza a Portugal, porque allí va a trabajar en la Fundación Aga Khan, y la búsqueda de una residencia universitaria en EE.UU para su hijo mayor había desatado todo tipo de rumores sobre la salud del matrimonio ambos han aparecido negando una vez más que se corresponda con la realidad.  El matrimonio se mostró unido en todo momento y muy pendiente de sus hijos. Mientras Juan y Miguel pasaron el rato practicante surf y paddle surf con la tutela de su padre, Irene y Pablo combinaron el agua con la arena bajo la atenta mirada de su madre.