La reina Letizia ha sido considerada durante muchos años como una reina ejemplar. Una de las mejores reinas que ha tenido España. La imagen de la monarquía ha cambiado notablemente desde que la ex de Televisión Española asumió el trono.
Después de años en los que la corona ha estado representada por una persona como Juan Carlos I, famoso por sus negocios corruptos, el dinero que tiene oculto en cuentas opacas, su pasión por la caza furtiva o por haber engañado de forma compulsiva a su mujer, Letizia decidió hacer un profundo lavado de cara.
Empezó alejando a la infanta Cristina y a Iñaki Urdangarin cuando estalló el caso Nóos. La consorte fue una de las que más presionó a Felipe para que los expulsara de la familia real. La imagen que estaban dando sentados en el banquillo estaba siendo muy negativa para la monarquía española y no favorecía en nada una buena opinión pública.
La reina Letizia, señalada por Casa Real
Siguiendo estas premisas, también se posicionó a favor de la decisión del Gobierno de mandar lejos de España a Juan Carlos I cuando se supo de su fortuna oculta. Así como también presionó para alejar a Froilán de España. La actitud del joven, cuarto en la línea de sucesión de la corona, en los últimos años, tampoco aportaba nada positivo a la imagen de la realeza. Y consideraba que lo mejor era alejarlo del foco público. Esta última acción, además, dejaba muy señalada a la infanta Elena. Al fin y al cabo, ha sido ella quien ha educado al Froilán involucrado en peleas con arma blanca o en desalojos de fiestas ilegales en las que, además, se encontraron sustancias estupefacientes.
Ahora, sin embargo, las tornas han cambiado. Las revelaciones de Jaime del Burgo acerca de un presunto affaire con la reina Letizia han dejado en muy mal lugar a la consorte. Ahora es señalada por muchos como una adúltera que castigaba a los demás mientras escondía muertos parecidos en su armario.
Algo que empieza a preocupar a Casa Real, donde consideran que ahora es Letizia la que no aporta una imagen positiva a la monarquía y a su continuidad. Es decir, no aporta una buena imagen para la princesa Leonor, la futura reina de España. No gusta que en España circule la idea de que Letizia influye a su hija. Y consideran que alejar a Letizia es el camino para construir un reinado de Leonor libre de cargas, polémicas y escándalos.