La reina Letizia es reconocida por su dedicación a los hábitos saludables. Su esbelta figura y su energía son prueba de su compromiso con una vida equilibrada. Desde su llegada a la Zarzuela, ha promovido una dieta libre de azúcares y grasas, enfocada en verduras, frutas, pescados y purés. Este estilo de vida saludable no solo es para ella, sino que también lo ha compartido con su esposo, Felipe VI, y sus hijas, Leonor y Sofía. Incluso extendió esta práctica al colegio de las princesas, influyendo en los menús del comedor del colegio Santa María de los Rosales.

Además de su enfoque en la alimentación, la reina Letizia ha sido una ferviente defensora del abandono del tabaco. Aunque en el pasado se especuló sobre su propia relación con el hábito, se ha mostrado como una antitabaco declarada. Sin embargo, se conoce sobre su supuesta indulgencia en ocasiones.

Letizia, declarada antitabaco, no puede resistirse a la tentación

El escritor Leonardo Faccio, en su libro "Letizia. La reina impaciente", planteó la posibilidad de que Letizia continuara fumando, a pesar de su postura pública en contra del tabaco. Estas afirmaciones se basaban en testimonios que sugerían que ella mantenía el hábito, aunque de manera discreta.

Letizia cara rara GTRES
Letizia cara rara GTRES

“Lo más extraño y sorprendente es que Letizia ha sido, de un tiempo a esta parte, abanderada de una lucha anti tabaco. Lo considera una ‘enfermedad y una amenaza social y médica’. Nunca se le ha visto fumar y no tolera que se fume en su presencia”, escribía Faccio después de deslizar que seguía fumando. Más tarde volvió a decirlo en una entrevista. “Ha hecho usted una afirmación que no sé si se va a creer nadie en España. Que la reina sigue fumando”, le comentaban. “Nunca fue un hábito permanente, era más una fumadora social. Este tema me lo han ido comentando mientras reporteaba en diferentes entornos. Recuerdo un académico que me contó que después de un acto la vio abrir el bolso y le sorprendió ver que tenía un paquete de Marlboro”, respondió Faccio.

Ha intentado dejarlo en varias ocasiones, pero sin éxito

Un vicio que todavía mantiene en la actualidad.  Letizia sigue fumando a escondidas. Y desde que es reina se ha sometido a vario tratamientos proporcionados desde Zarzuela para intentar dejarlo. Pero siempre acaba recayendo en los momentos difíciles. No logra dejarlo del todo. Fuma en los lavabos, a escondidas. Sobre todo cuando los nervios le reconcomen por dentro. Por ejemplo, cuando murió su hermana recayó, o cuando ha tenido crisis con Felipe VI. Lo máximo que ha conseguido es reducir el consumo al máximo, fumando algún que otro cigarrillo esporádico.