Se especula que la jubilación de la reina Sofía está cada vez más cerca, especialmente ahora que la princesa Leonor ha cumplido 18 años y ha jurado la Constitución, asumiendo un papel más destacado en representación de la Corona en eventos oficiales. Esta transición podría llevar a la emérita a abandonar su residencia en La Zarzuela en busca de un lugar más tranquilo, alejado de la vida pública. Aunque el Palacio de Marivent se perfila como la opción más plausible, la verdad es que Sofía anhela reconectar con sus raíces griegas al trasladarse a un lugar que evoca los mejores recuerdos de su infancia y juventud: el palacio griego de Tatoi. Lamentablemente, este lugar está actualmente en ruinas, y la situación económica en Grecia, que llevó a la familia real griega al exilio, no permite su rehabilitación.

Carlos III: aliado inesperado de la reina Sofía

Sin embargo, de manera sorprendente, el rey Carlos III de Inglaterra ha emergido como un nuevo aliado de la reina Sofía al ofrecer al gobierno griego una suma de 12.3 millones de libras esterlinas, aproximadamente 15 millones de euros, destinada a la restauración de este palacio. Aunque esta cantidad no cubre por completo los costos del proyecto, marca un compromiso significativo por parte de la Familia Real británica en la preservación de este sitio histórico, asociado con los recuerdos más preciados de la reina Sofía.

Y es que, la relación de la reina Sofía con Tatoi es evidente, ya que el cementerio del palacio alberga a sus padres y a su hermano Constantino, el último rey griego. Por otro lado, el rey Carlos III tiene sus propios vínculos con Grecia a través de su padre, el príncipe Felipe de Edimburgo, quien antes de unirse a la Casa Real inglesa fue príncipe de Grecia. Además, el monarca británico mantenía una relación cercana con Constantino de Grecia.

En marzo de 2021, Carlos III, aún heredero de la Corona británica, realizó una visita privada a Tatoi en compañía de Camilla Parker Bowles. Este evento, parte de las conmemoraciones por los 200 años de la independencia de Grecia, resultó en una inversión de 15 millones de euros un año después. Según la prensa, para el monarca británico, el palacio sigue siendo el hogar de su familia paterna, ya que su abuelo, el príncipe Andrés de Grecia y Dinamarca, descansa en paz en ese lugar.

Tatoi: de palacio en ruinas a museo

Tal es la conexión entre Carlos III y Tatoi que, en 2022, el monarca se reunió con el primer ministro griego para desarrollar un plan conjunto entre Gran Bretaña y Grecia con el objetivo de transformar Tatoi en un palacio-museo. Según la prensa británica, The Prince's Trust, una de las numerosas fundaciones que actúan en nombre de Su Majestad, asesorará al gobierno griego en la restauración del complejo y en la catalogación de las obras que alberga.

La reforma, programada para concluir en 2025, contempla la conversión de los establos del rey Jorge I en un museo y la revitalización de los jardines, que albergan diversas tumbas reales y, según se pudo observar en el entierro de Constantino, actualmente parecen descuidados. Además, podría convertirse en el nuevo hogar de la reina Sofía. Este esfuerzo de los Windsor refleja su compromiso por preservar un vínculo significativo con la familia real griega.