Un macho de urogallo en celo ha muerto en el municipio de Benasque, en Huesca, tras ser acosado por grupos de turistas que querían fotografiarlo mientras exhibía su plumaje para atraer la atención de las hembras.

Esta especie, incluida en los catálogos estatal y aragonés de especies amenazadas, acostumbra a tener un comportamiento esquivo y nocturno. Pero según informa el Gobierno aragonés, durante la época de celo, que se prolonga unos pocos días en primavera, se deja ver en zonas atípicas y a veces frecuentadas por personas.

Ante este escenario, agentes para la Protección de la Naturaleza fueron informados de que el pasado 26 de abril un ejemplar de urogallo en celo se aproximaba a personas en la zona de la Plana de Senarta. A pesar de que el ejemplar pudo ser trasladado un día después a una zona alejada, en el momento de su captura ya había sido objetivo de multitud de fotografías y de persecuciones para “inmortalizar” su comportamiento y su inusual acercamiento a las personas.

Hace unos días el animal apareció de nuevo en el mismo lugar y volvió a sufrir una lluvia de flashes. Los agentes volvieron a trasladarlo a una zona más segura, pero el urogallo murió antes de que pudiese ser liberado. Quedan pendientes los detalles de la autopsia, pero las fuentes indican que el estrés sufrido durante los últimos días ha sido la causa del fatal desenlace.

En la actualidad, en el Pirineo aragonés quedan menos de 50 machos reproductores, lo que motivó en 2015 la aprobación de un plan de conservación del hábitat del urogallo.