Un subinspector de la Guardia Urbana de Barcelona irá a juicio por haber difundido por correo electrónico una fotografía de carácter sexual de su expareja, también agente del cuerpo. Según ha avanzado este jueves La Vanguardia, los hechos se remontan en febrero de 2008, cuando la chica, de 23 años, rompió la relación que mantenía desde hacía unos meses con una jefe de la Guardia Urbana, de 36 años.

Según el relato de la Fiscalía, él accedió al correo electrónico de la chica por despecho y envió a todos sus contactos una fotografía de ella haciendo una felación, acompañada de su número de móvil, incitando a llamarle para servicios sexuales.

Inicialmente, él negó haber sido el autor del envío masivo. Tiempo más tarde, la chica grabó una conversación telefónica donde él reconocía haber enviado el correo y la magnitud de lo que había hecho, lamentando que estaba enfurecido. La víctima decidió denunciar el caso después de sentirse constantemente observada y señalada por el resto de compañeros del cuerpo policial. Una vez interpuesta la denuncia, asegura que varios mandos le pidieron que la retirara porque podía "hundir" la carrera de su excompañero.

A raíz de los hechos, la chica pidió un traslado de comisaría, pero así y todo lamenta que seguía siendo el centro de comentarios. Ella sostiene que tanto la fotografía como el hecho de haber denunciado a su expareja han frenado su carrera profesional.

El subinspector está acusado de un delito contra la intimidad por descubrimiento y revelación de secretos. Su expareja, agente de la Guardia Urbana, denunció a los Mossos d'Esquadra que él había sido el autor del envío masivo de una fotografía suya haciéndole una felación, hecho que la convirtió en objeto de miradas y comentarios de los compañeros de trabajo y conocidos.

El juicio se celebrará el próximo 28 de abril. La Fiscalía y la acusación particular piden una pena de 3 años de prisión.