Estos datos se desprenden del informe que ha encargado el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Barcelona en una auditoría donde se revelan varias irregularidades en el proyecto y contratación de las obras del túnel de la plaza de Les Glòries.

Janet Sanz, teniente de alcalde de Ecología, Urbanismo y Movilidad, ha sido la encargada de presentar este jueves las conclusiones del informe donde se afirma que las obras generarán un retraso de 19 meses y un sobrecoste de casi el 20% del precio de adjudicación. El gobierno de Ada Colau ha encargado un estudio técnico y otro jurídico para ver con qué posibilidades legales cuenta para pedir responsabilidades.

La auditoría, encargada por Barcelona Infraestructures Municipals S. A. (BIMSA) al Institut de Tecnologia de la Construcció de Catalunya (ITEC), concluye que la oferta que presentó la UTE que ganó el concurso, de 60,1 millones de euros, fue un 24,3% más baja del precio de licitación, y eso "suponía un riesgo económico relevando que hace muy difícil el normal desarrollo de la obra".

Entre otras irregularidades, la auditoría, que califica la obra de "alta complejidad", ha encontrado que hubo "una incompleta información previa, y previsiones y evaluaciones de riesgos económicos y temporales excesivamente optimistas por parte del proyectista".

La auditoría reconoce que ha habido también causas sobrevenidas, y concluye que la UTE adjudicataria "no dispone de los recursos adecuados para disminuir los retrasos generados"