Con 50 agentes de la Guardia Civil se podrían sustituir los trabajadores en huelga de los controles de seguridad del aeropuerto de El Prat. En cambio, el Estado ha enviado casi a 200. Así lo ha explicado esta mañana el portavoz de la Asociación Unificada de la Guardia Civil, Juan Fernández, en una entrevista en El Món a Rac1.

En un principio, el Ministerio del Interior desplazó a una treintena de agentes con la previsión de que se quedaran en el aeropuerto catalán durante unos cuatro días. Finalmente, se ha acabado enviando cerca de dos centenares y se está valorando la posibilidad de que se queden en El Prat hasta el final de este mes de agosto.

Esta movilización no ha gustado a los agentes, que ven un despliegue "excesivo" ya que la seguridad en el Prat "está garantizada todo lo que podría estarlo" y, para reforzar los arcos de seguridad durante la huelga de Eulen, habría bastante con 50 agentes.

Explica que es una decisión del Estado y "no nos queda otra que ir", pero recuerda que el cuerpo sufre un déficit de plantilla que se agrava con este movimiento de dispositivos. "No creemos que el conflicto de El Prat necesite tantos guardias civiles, pero ellos sabrán el porqué de este despliegue", se resignaba Fernández.

En este sentido, también ha querido denunciar la situación personal de los agentes que se ven desplazados "de manera forzosa" desde toda España y que "han tenido que dejar su casa y sus familias".

Por otra parte, Fernández ha negado vínculos directos entre este aumento de su presencia en El Prat y la celebración del referéndum del 1-O. Estos agentes "están aquí con una misión muy específica y unas instrucciones muy claras" para evitar aglomeraciones.