Una operación policial con participación de la policía española, agentes del FBI y del Servicio de Inmigración y Aduanas estadounidenses ha logrado la detención en Nueva York de un fugitivo de la justicia española, un dominicano nacionalizado español acusado de matar a su compañera sentimental en Barcelona en octubre de 1997.

El cadáver de la mujer fue localizado ocho meses después en un paraje de Viladecans y el presunto autor llegó en la noche del mismo día del homicidio a Nueva York, donde ha estado residiendo de forma irregular sirviéndose de documentación falsificada.

El arresto se ha producido a instancias de la Policía Nacional y gracias también a gestiones de la Consejería de Interior de la Embajada de España en Washington, cuatro meses antes de que el delito prescriba.