El autor del tiroteo de Gavà que hirió a dos policías locales pasará a disposición judicial justo cuando reciba el alta médica. Hasta que no sea así, estará bajo custodia policial en el Hospital Clínic de Barcelona, donde se recupera de las heridas sufridas en su detención.

El detenido, un español de 44 años sin antecedentes, intentó atropellar a dos Mossos d'Esquadra que le dieron el alto cuando huía en coche después del tiroteo, y para evitarlo los agentes efectuaron varios rasgos|tiros, que lesionaron en un brazo y una pierna.

Por su parte, los dos agentes heridos también están hospitalizados, uno en situación grave en el Hospital de Bellvitge y otro, de menor magnitud, en el centro hospitalario de Vall d'Hebron.

Ayer tarde, el conseller de Interior, Jordi Jané, detalló que el sargento que recibió un impacto en la cara había sido operado de urgencia y que la intervención había ido bien, aunque no se podía garantizar que se encontrara fuera de peligro. Mientras se espera que el detenido pase a disposición judicial, los Mossos siguen con la "sólida" línea de investigación abierta después del suceso, por la cual el tiroteo de Gavà estaría relacionado con el crimen del pasado 3 de julio de un hombre en Miami Platja, en Mont-roig del Camp (Baix Camp).

Se da el caso de que el cadáver del asesinato, de 63 años, se velaba precisamente ayer en el tanatorio de Gavà, cerca de donde el detenido disparó a los policías, ya que la munición usada en los dos casos coincide. Los Mossos también indagan si el detenido está relacionado con el tiroteo protagonizado el pasado 29 de junio en Vilanova i la Geltrú (Garraf), donde un hombre irrumpió en un bar y disparó mortalmente un camarero y dejó herida grave a la propietaria del local. Precisamente, la policía científica de la policía catalana está estudiando la réplica de AK-47 tipos subfusil que utilizó ayer el agresor para descubrir si los tres ataques se han efectuado con la misma arma.