La Guardia Civil han detenido hoy en Palamós a una mujer, de 21 años, de nacionalidad española, nacida y residente en esta localidad, por llevar a cabo actividades de autoradicalización, captación, reclutamiento y envío de yihadistas a zonas de conflicto.

La joven formaba parte de una red de individuos afines a Daesh y actividades habían sido detectados por los servicios de información e inteligencia internacionales desde hace dos años. Durante los años de máxima actividad de reclutamiento y difusión de contenidos radicales, Daesh estableció una rigurosa e intensa campaña dirigida, en buena parte, a ciertos colectivos femeninos, con la finalidad de concretar su desplazamiento a zonas de conflicto.

El alto grado de vulnerabilidad que estos grupos ofrecían, encontraban en la organización terrorista un importante recurso de afiliación, como así sucedió en el grupo conformado, entre otros, por la detenida esta madrugada.

Propaganda yihadista

En el caso de la joven detenida en Girona, y a semejanza de otros modelos de radicalización, su tránsito hacia el extremismo se había consolidado en los dos últimos años, combinado, por un lado, un modelo autodidacta mediante el consumo de propaganda yihadista y, por otro, con la intervención, a través de redes sociales, de otras personas, mujeres principalmente, que contribuyeron de forma decisiva a la concreción del ideario yihadista.

Este proceso de radicalización le llevó paulatinamente a sucumbir a las más severas exigencias del rigor salafista, tanto en lo referido a la utilización del código de vestimenta estricto, absolutamente inusual en el entorno de vida de la detenida, como en el progresivo aislamiento de su actividad pública, que se ha ido apagando de forma alarmante, hasta el punto de ser inusual su actividad social.

Las detenciones de varios de las personas con las que se relacionaba, hicieron que paulatinamente su actividad se fuera rodeando de nuevas medidas de seguridad que impedían realizar el completo seguimiento de sus actividades.

Manipular voluntades

Respecto al autoadoctrinamiento de la detenida, la investigación ha revelado como los grupos cerrados a los que pertenecía dedicaban la mayor parte de su actividad a manipular las voluntades de las usuarias con objeto de que se materializara su desplazamiento a zona de conflicto, que no sólo hacían bajo la difusión de una propaganda llamativa en lo positivo de la vida en esa región, sino que introducían elementos de gran contenido violento, destacando continuos videos y referencias a todo tipo de ejecuciones y acciones bélicas.

La colaboración del FBI ha resultado fundamental en la identificación de las conductas delictivas de la joven detenida hoy en Palamós. Fruto del intenso trabajo de los investigadores de la Guardia Civil y del FBI, se determinó la existencia de otros individuos cuyas conductas fueron objeto de intervención judicial, y que motivó la ejecución de sendas detenciones.

En uno de los casos, materializada sobre una mujer detenida en noviembre de 2015 en la provincia de Barcelona, acusada de colaboración con la organización terrorista Daesh.

Los vínculos

En este sentido, el pasado mes de junio de 2016, y fruto de la referida colaboración con autoridades norteamericanas, fue detenido un individuo en Estados Unidos con el que la detenida mantenía una estrecha vinculación, y cuya detención, permitió abortar el proyecto de desplazamiento a Siria de ambos.

La Guardia Civil está registrando el domicilio de la detenida para recabar las evidencias que permitan determinar su grado de implicación en las actividades de los grupos terroristas a los que apoya, así como sus posibles vínculos tanto en España como a nivel internacional.

La operación se ha desarrollado bajo la dirección del Juzgado Central Instrucción, Número 1, y la coordinación de la Fiscalía de la Audiencia Nacional.