Un vídeo protagonizado por el hombre que perdió la visión de un ojo el 1 de octubre, Roger Español, denuncia el uso de balas de goma por parte de las fuerzas españolas. En el cortometraje, que lleva el título Stop Bales de Goma, la víctima de la violencia de Estado explica su terrible experiencia en la jornada del referéndum.

El cortometraje empieza con unas declaraciones del activista Ester Quintana, que corrió la misma suerte el año 2014. En las palabras de Quintana, extraídas del reportaje Perder un ojo, la barcelonesa deseaba que ninguna persona le pasara lo mismo que le pasó a ella. "Esto me pasó a mí pero le podría haber pasado a cualquiera. Y lo que yo no quiero es que eso le vuelva a pasar a nadie más", decía ya entonces en aquel reportaje recuperado en este nuevo vídeo, que ahora sigue con la historia de Español.

El músico Roger Español perdió la visión de un ojo el pasado 1 de octubre en una carga policial de la Policía Nacional en la escuela Ramon Llull. Español recuerda que la gente actuaba de manera pacífica en defensa de la votación y que, a pesar de todo, la policía empezó a cargar. "En el momento del impacto estábamos esperando que la policía se acabara de retirar", explica Español, que recuerda que seguía el camino de la policía porque era lo mismo que tenía que hacer para ir a casa.

"El primero que hice fue tirarme el suelo por el dolor", explica Español en un relato detallado de los hechos. El músico recuerda que los periodistas lo socorrieron y lo ayudaron, y también rememora que otras personas sufrieron los efectos del ataque policial. Español también explica que sigue sufriendo dolores y mareos y, por este motivo, tiene que tomar medicación. "Supone un proceso de adaptación a nivel cognitivo. (...) Es todo muy complicado", relata la víctima, que asegura "no haberse acostumbrado" a perder la visión de un ojo.

El vídeo culmina con las duras imágenes del momento del impacto y recuperando el mismo discurso de Quintana: "Deseo que nadie vuelva a pasar por lo mismo". El vídeo recuerda que las pelotas de goma estuvieron prohibidas a Catalunya en abril de 2014, después de una importante campaña ciudadana en contra de estas armas que habían dejado ciegos de un ojo a varias personas.