La vicepresidenta del Gobierno español, Soraya Sáenz de Santamaría, ha hecho hoy un Esperanza Aguirre. Ha aparcado el coche oficial en pleno carril bus de la Gran Vía de Madrid, ha bajado acompañada de su jefa de gabinete y ha entrado en el Primark. Han estado doce minutos en la tienda.

Así lo publica este lunes el Eldiario.es, que explica que los hechos han tenido lugar hacia las diez y media de la mañana y que han sido dos los coches que han aparcado en este carril del centro de Madrid. En uno, iban la vicepresidenta del Gobierno y su jefa de gabinete, mientras que en el otro, iban sus escoltas.

Esta infracción está tipificada como grave y tiene una sanción de 200 euros.

Santamaría no es la única que ha cometido una sanción así. Hace unos años, ya hubo mucha polémica después de que la portavoz del grupo municipal del PP en Madrid, Esperanza Aguirre, estacionado en el carril bus de esta misma calle para sacar dinero de un cajero automático. La polémica, sin embargo, fue más fuerte en esta ocasión, porque la policía municipal la acusó de darse a la fuga cuando la querían multar.