Dicho y hecho. El Gobierno ha rebajado las expectativas de crecimiento del PIB del Estado y ha señalado que es el resultado de la situación política a Catalunya. De esta manera, el ministro de economía, Luis de Guindos, cumple su advertencia de reducir las buenas previsiones del PIB para el año 2018.

De Guindos ha rebajado del 2,6% a 2,3% la previsión de incremento del PIB para el 2018. Además, pronostica que incumplirá el objetivo de déficit del 2,2% impuesto por Bruselas, llegando al 2,3%, si no se pueden aprobar los presupuestos generales del estado para el próximo año. En el Plan Presupuestario 2018 remitido a la Comisión Europea este lunes, al Gobierno culpa la situación política en Catalunya y asegura que "la eliminación de la incertidumbre y la aprobación de los presupuestos generales del estado del 2018" harían aumentar el crecimiento y disminuir el paro, "lo que facilitaría el cumplimiento del déficit público". Por lo que hace en paro, el ejecutivo español prevé que se siga reduciendo hacer acabar el año con una tasa del 17,2% y del 15,5% el próximo año. El cuadro macroeconómico del informe también augura un ligero aumento del crecimiento en el 2017, del 3 al 3,1%.

Con respecto al objetivo de déficit se eleva una décima la previsión, hasta el 2,3%, y también lo atribuye a la situación que se vive a Catalunya. Sin embargo, asegura que los presupuestos generales del Estado del 2018 incluirán herramientas para volver al objetivo fijado. Una aprobación que de momento está suspendes por la negativa del PNV a dar apoyo a las cuentas, justamente con el caso catalán como telón de fondo.

El informe también pone de manifiesto que todas las autonomías "excepto Catalunya" han enviado al ministerio de Hacienda las líneas fundamentales de los presupuestos del 2018, en los cuales trabajan para cumplir el objetivo de déficit autonómico del 0,4%.

De Santamaría lo advirtió

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, aseguró el viernes después del Consejo de Ministros aseguró que si no se solucionaba "pronto" el conflicto catalán, el ejecutivo tendría que rebajar las expectativas de crecimiento económico para el próximo año. Y así lo ha hecho. En el plan presupuestario que ha enviado a la Comisión Europea, el Gobierno explica que ha rehecho las previsiones para el 2018 todo teniendo en cuenta una "ligera contención de la demanda interna, resultado del impacto negativo asociado a la actual situación política en Catalunya". Sin embargo, recuerda que el crecimiento estimado del 2,3% sigue están por encima de la media de la Eurozona. Se trata de un escenario "prudente", asegura el ejecutivo.